♕ La Promesa del día: “Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová En la tierra de los vivientes. Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová.” Salmos 27:13-14
¿Dinia cómo comenzó en realidad tu restauración?
Siempre fue un matrimonio difícil después de 6 años de casados y 7 de noviazgo. Dios me mostró el número 7, y al principio del séptimo año de casados, mi mundo se desmoronó. Durante ese mismo tiempo tuve un sueño en el q’ mi esposo se moría y yo caminaba por una larga calle, donde me iban apareciendo los hermanos de nuestra iglesia para darme condolencias y justo cuando iba a llegar a donde estaba mi familia, me desperté.
A esa misma hora le conté a mi esposo acerca de mi sueño y me dijo: “Eso significa un nuevo comienzo”. Al momento yo no sabía q’ él ya tenía OM (Otra Mujer), pero más tarde comprendí q’ se refería a una nueva vida con esa mujer. Pero lo más importante, tiempo después comprendí q’ tenía razón ‘una nueva vida’ con 2 personas totalmente nuevas y renovadas. El esposo q’ tenía, moriría espiritualmente y nacería otro, formando una nueva vida donde la piedra del ángulo sería nuestro Señor!
Días después, él empezó a actuar diferente, me di cuenta en su cumpleaños, cuando empezó a tomarse fotos con todos los miembros de su familia menos conmigo e incluso durante la celebración se desapareció durante 1 hora, por más q’ lo busqué nadie supo a donde se fue y cuando regresó se fue a hablar con su mamá en privado.
4 días después, por fin tomó el valor para confesarme q’ había encontrado a “la mujer perfecta para él, con la q’ siempre había soñado y que era tal cual como él siempre soñó con tener, e incluso el haberse casado conmigo había sido un error desde un principio y él siempre lo supo”. Desde ese momento el dolor fue demasiado e irreparable, nunca había conocido tanto dolor y rechazo en mi vida.
¿Dinia cómo cambió Dios tu situación mientras lo buscabas a Él con todo el corazón?
Mi Dios, como siempre tan misericordioso, ya sabía lo q’ había de venir, así q’ me preparó desde 8 meses antes, cuando empezamos a tener algunos problemas; y de la nada, no sé cómo me guió a Restore Ministries International y para cuando la infidelidad fue revelada, yo ya había leído el libro “Cómo Dios puede y va a Restaurar tu Matrimonio” y había tomado los 3 cursos de Restauración Matrimonial, así q’ inmediatamente hice lo q’ tenía q’ hacer de acuerdo a la palabra de Dios, excepto por una una cosa: corrí a mi esposo de la casa. No podía soportar la idea de vivir juntos estando él enamorado de OM. Además de q’ en mi pensamiento egoísta dije q’ no lo pensaba mantener, ya q’ en ese momento yo ganaba más q’ él y no iba a vivir a costa de mí o solo por conveniencia. Él felizmente se fue a vivir con su mamá.
¿Qué principios, de la Palabra de Dios (o por medio de nuestros recursos) Dinia, te enseñó el Señor durante esta prueba?
Mientras todo esto pasaba, mi Dios estaba cambiándome desde lo más profundo de mi corazón, usando mi corazón totalmente roto para hacer uno nuevo. Al principio cada cosa que mi esposo hacía me destrozaba por completo, pero a medida q’ mi relación con mi Señor crecía, también crecía mi fuerza y me daba cuenta de que había empezado a madurar espiritualmente, y aún más importante, ya no creía tan fácil las mentiras del enemigo.
¿Dinia cuáles fueron los momentos más difíciles que Dios te ayudó a atravesar?
La OM (Otra Mujer) lo enamoró por Facebook y WhatsApp, ella vivía en otro país a miles de kilómetros de nosotros. Y en cuanto “se enamoraron” hicieron planes para encontrarse en Estados Unidos y empezar una nueva vida juntos. Después q’ nos separamos, un día mi esposo me contactó para pedirme ayuda para conseguirle un boleto barato (sin regreso) para irse a EU. En ese momento, lo único q’ hice fue llorar con mi Señor y darle toda mi situación a Él, no había nada más q’ yo pudiera hacer. Así q’ le dije a mi esposo q’ si, y así lo hice. Se lo conseguí.
Cuando le entregué toda mi situación a Dios sin poner resistencia a su voluntad, Dios me empezó a mostrar su fidelidad y mi esposo incluso me dijo q’ nos fuéramos juntos como un viaje de despedida. Eso me hizo pensar q’ no era del todo verdad eso de q’ amaba a la OM con locura, pero mi Dios puso todas las trabas para q’ yo no pudiera comprar un boleto para mi a ese viaje.
Y la noche antes de q’ mi esposo volara, se quedó en nuestra casa ya q’ nadie lo podía llevar al aeropuerto más q’ yo. Esa noche fue una de las más difíciles, en donde sentí el mayor rechazo de toda mi vida. Mi esposo se estuvo mensajeando con la OM durante la madrugada, incluso le habló y cuando empezó a dar tono colgó, afortunadamente la OM no contestó, sino, no sé que hubiera hecho, y mi esposo no quería dormir en nuestra cama, pero al final accedió dándome la espalda toda la noche y en la orilla lo más alejado que pudo estar. Nunca me imagine q’ el esposo cariñoso y amoroso q’ siempre conocí me repudiara de esa manera, y esto apenas empezaba.
A la mañana siguiente lo llevé al aeropuerto y con las fuerzas q’ me quedaban lo abracé y le dije: A lo mejor ya nunca te vuelvo a ver, pero quiero q’ sepas q’ de todas maneras te deseo lo mejor. Tomó el avión y se fue. Y cuando creí q’ todo había terminado, mi Dios hizo su primer milagro en mi vida.
Mi esposo llegó al aeropuerto de EU y el agente de migración q´ lo recibió, vió algo en sus ojos q’ solo Dios sabe qué fue, pero lo llevó aparte para hacerle mas preguntas, ahí revisó su teléfono y se dió cuenta de q’ mi esposo planeaba quedarse en EU y le negó la entrada! Incluso encontró mensajes de su amante y lo cuestionó sobre la infidelidad! Por lo cual mi esposo se molestó muchísimo, cuando yo lo supe, no pude más q’ sorprenderme de cómo mi Dios les habla a sus hijos de mil maneras!
Esa misma tarde recibí una llamada del agente diciéndome q’ recogiera a mi esposo en el vuelo de regreso por la noche! Yo caí inmediatamente de rodillas agradeciendo a mi Padre Celestial por sus planes para mi vida.
Mi esposo regresó a México pero siguió viviendo con su mamá para continuar haciendo planes para estar con la OM.
¿Cuál fue el “momento crucial” de tu restauración Dinia?
Empecé a llevar un diario donde anotaba cada señal, promesa y milagro, grande o pequeño q’ Dios hacía en mi vida, para mantenerme enfocada y recordar todo lo que hizo por mi en este proceso tan doloroso pero necesario. Además de ayudarme a recordar lo que algún día escribiría como mi Testimonio de Restauración Matrimonial.
Una vez, después de ver por casualidad unos mensajes q’ mi esposo y la OM se mandaban, Empecé a llorar y a preguntarle a Dios porqué. Dios me habló en ese momento, y me dijo q’ yo había sido creada para mi esposo y mi esposo había sido creado para mi. Incluso aunque mi matrimonio pareciera como un error, no lo era. Él tenía un propósito para nosotros.
Mi esposo, mientras tanto seguía viniendo a la casa durante la cuarentena por COVID y nuestra relación era amigable. Incluso Dios quito por completo el egoísmo de mi corazón y me dio la oportunidad de ayudar a mi esposo a invertir en maquinaria para un nuevo negocio incluso cuando su relación con la otra mujer cada vez se hacía más fuerte (a mi vista). Todo el día y toda la noche él estaba en línea con ella, lo único q’ yo quería hacer es agarrar ese teléfono y destruirlo en el suelo! Me volvía cada vez más loca! Pero solo Dios pudo detenerme para no perder el control, solo Él!!!
La parte más difícil de mi viaje de restauración fue dejar ir a mi esposo. Era imposible. Pero sabía q’ tenía q’ hacerlo, tenía q’ entregárselo todo a Dios y ganar nuevamente su corazón sin una sola palabra como dice el libro.
Solo fue posible cuando le pedí a Dios q’ lo hiciera por mi, y es tan grande q’ Él hizo que poco a poco fuera soltando a mi esposo.
La amistad entre mi esposo continuó y más cuando él se dio cuenta de q’ tenía su libertad y q’ yo no estaba tratando de manipularlo o retenerlo, sino q’ respetaba su decisión. Para esto pasaron meses y yo me sentía estancada! Le pedía a Dios q’ me sacara de ese estancamiento, ya que no era la amiga, sino la esposa! Quería el amor de mi esposo de vuelta!
Después de largos e interminables meses, por fin mi esposo y la mujer terminaron esa relación. Hasta la fecha no se porqué, lo q’ si sé es q’ mi esposo me dijo una vez q’ “era fea y aparte estaba loca, y q’ lo amenazaba con suicidarse si la dejaba, siempre lo presionaba y manipulaba para q’ no se despegara del teléfono”. Es increíble como pude pensar q’ se la pasaban genial en esas interminables pláticas, la realidad era otra.
Gracias mi Señor por revelarme la verdad!!!
Después de terminar su relación, empezó a acercarse más a mi y finalmente regresó a casa. Estuvimos muy bien durante 3 semanas y yo estaba q’ no cabía de felicidad, hasta q’ empecé a notar algo raro.
Me di cuenta de q’ empezó a platicar con otra mujer, y no solo eso, ésta nueva mujer vivía muy cerca de nosotros!!! No lo podía creer! Le pregunté mil veces a Dios porqué? Porqué otra vez??!!! No quería pasar por lo mismo otra vez!!! Peleé con Dios por días y cómo sentía q’ no hacía nada, tomé la situación en mis manos y confronté a mi esposo de la manera más amable q’ pude.
Le dije q’ lo amaba pero q’ sabía q’ había otra persona, no habló mucho, al principio lo negó, pero como no se sintió atacado, lo termino por aceptar dándome a entender q’ la iba a dejar. Nunca lo hizo. Todo lo contrario, siguió viéndola y yo me sentía cada vez más humillada y usada. En ese momento comprendí q’ por más q’ quisiera, no podía controlar nada. Nuevamente fui a mi Padre Celestial y le pedí perdón por haber tomado la situación en mis manos, me humillé ante su presencia echando toda mi ansiedad sobre Él, porque Él cuida de mi. (1 Pedro 5:6).
Solamente Dios sabe porqué permitió q’ esto pasara, quizá xq tenia q’ pasar por el último proceso de refinamiento.
Mientras tanto, semana tras semana veía como su relación se hacía cada vez más fuerte. Pero yo seguía orando Salmos 92:7, 11, 15 (“Cuando brotan los impíos como la hierba, Y florecen todos los que hacen iniquidad, Es para ser destruidos eternamente." "Y mirarán mis ojos sobre mis enemigos; Oirán mis oídos de los que se levantaron contra mí, de los malignos." "El justo florecerá como la palmera; Crecerá como cedro en el Líbano." "Para anunciar que Jehová mi fortaleza es recto, Y que en él no hay injusticia.”)
Mi esposo siguió viviendo conmigo, pero en vez de una bendición, lo sentía como una maldición al verlo mensajearse con la OM todo el día y hasta las madrugada! Supuestamente dormía conmigo pero chateaba con ella hasta quedarse dormido en la sala. Escuchaba canciones románticas todo el tiempo y se arreglaba como nunca para salir a verla. Algo se moría dentro de mi cada día. Le pedí miles de veces a Dios q’ lo sacara de mi vida, q’ ya estaba lista para dejarlo ir para siempre, pero q’ fuera Él el q’ lo sacara, yo quería hacer su voluntad y si Él decía en su palabra q’ la esposa no debe separarse de su marido no lo iba a hacer, pero le rogué q’ por favor tuviera misericordia y se lo llevara para siempre. Mi carne quería darle literalmente una patada y cerrar la puerta para siempre. Si no hice todo lo que me venía a la mente, es porque Dios es mucho más grande y es capaz de hacer mucho más de lo que pedimos o imaginamos y porque su poder se perfeccionó en mi debilidad. Quise rendirme cada día todos los días. Pero Mi Dios no lo permitió. A pesar de mis súplicas, no se lo llevó. Me hizo entender con el tiempo q’ si se lo llevaba abriría la puerta aun más al enemigo y q’ no era tiempo de rendirme después de todo el cambio que Él ya había hecho en mi. Cuando la situación se volvía insoportable para mi, yo sacaba una excusa para salir del cuarto o de la casa para literalmente quitar los ojos de mi esposo y de lo que hacía. O incluso estando en el mismo cuarto, me ponía unos audífonos y ponía música cristiana para enfocarme solo en el Señor. Leía su palabra desde mi celular para q mi esposo no se diera cuenta, y de repente todas las historias y enseñanzas de la Biblia tenían algo q’ ver con mi situación, ahí es cuando de verdad experimenté como Dios habla a través de ella. Me aferré a todas las promesas q’ encontraba xq sabía q’ si las creía, entonces eran para mi.
Cada vez q’ soltaba a mi esposo de mi control, Dios me bendecía por eso. Una ocasión salió la oportunidad de viajar un fin de semana de trabajo a una playa, ya hacía tiempo q’ yo le había pedido a Dios q’ me permitiera descansar de todo esto por unos días, q’ quería hacer un viaje solo con Èl. Y cumplió ese deseo. Yo estaba feliz pero al mismo tiempo el miedo se apoderó de mi pensando q’ en cuánto me fuera, mi esposo correría a los brazos de la otra mujer. Pero le confesé mis miedos a Dios y me hizo comprender q’ aunq me quedara no tendría el control de nada ni nadie. Así q’ tomé un paso de fe. Me fui y pasé unos días estupendos junto a mi Dios, comí riquísimos, paseé por la ciudad y para mi sorpresa mi esposo no solo no vió a la OM sino que se la pasaba hablándome para saber cómo estoy, y diciéndome q’ era raro pero que me extrañaba mucho (solo Dios pudo hacer eso!!!!)
Yo, por mi parte seguía siendo respetuosa y gentil con mi esposo, ganándolo sin una palabra como dice el libro de Una Mujer Sabia pero sin rogarle, como amigos solamente. Mi Dios se volvió mi único paño de lágrimas, mi Consolador, mi Admirable Consejero y Refugio. Yo lloraba en el baño sin q’ mi esposo me viera, en la cocina, mientras cocinaba y hacía las cosas de la casa, le pedía a Dios incansablemente q’ me librará de la idolatría por mi esposo, q’ me salvara de mi falta de fe, y q’ salvara mi matrimonio xq se hundía.
Incluso un día tuve una visión donde yo estaba en una barca tratando de jalar a mi esposo q’ estaba con el agua hasta el cuello, pero entre más trataba de jalarlo más la balsa se mecía y estaba a punto de caerme con él, ahí comprendí q’ necesitaba de alguien más fuerte q’ yo para poder sacarlo del agua, y ese es mi Señor.
En otra ocasión soñé q’ mi esposo y yo íbamos en un carro, él iba muy enojado y mientras manejaba iba gritándome y ofendiéndome, yo permanecía callada y en eso, el coche saltó hacia un río, yo quedé inconsciente y cuando desperté el Señor estaba en un helicóptero jalándonos rescatándonos con una cuerda, y cuando volteaba a ver abajo, había muchos cadáveres en el río. Pero a nosotros nos salvaba!.
¿Cuéntanos Dinia cómo pasó, tu esposo sólo regresó por la puerta principal?
Cuando estaba cerca mi restauración, las cosas se pusieron muy mal, cada día peor.
Mi situación no tenía ninguna esperanza ante mis ojos ya que mi esposo se la pasaba días enteros en casa de la OM. Mientras q’ conmigo era muy frío y apenas si estaba en casa algunos pocos días, y cuando estaba se la pasaba en el teléfono o en la TV. Se arreglaba mucho cada vez q’ salía a verla, al principio eso era un infierno para mi, me sentía morir cada vez q’ lo veía irse y no podía dejar de pensar en lo q’ estuvieran haciendo mientras estaban juntos, y me la pasaba declarando la Palabra de Dios y ayunando en su ausencia, ante mis ojos no servía de nada pues nada cambiaba, pero después, poco a poco sentí como mi Señor me fue sanando, y empecé a darme cuenta de q’ había sanado cuando dejé de preocuparme, al fin pude tomar todo pensamiento cautivo a la obediencia al Señor y reemplazarlos por las promesas en su Palabra. Noté q’ ya no sentía ese golpe de adrenalina q’ sentía cada vez q’ él se iba, sino q’ aceptaba la voluntad de Dios, mi Señor quitó de mi corazón todo el temor y la desesperanza de mi situación. Sabía q’ solo era cuestión de tiempo para q’ mi Dios trajera de vuelta a mi esposo.
Incluso había días en los q’ le pedía al Señor irnos de cita, para pasar todo el día juntos mientras mi esposo no estaba, y escogía mi lugar favorito para ir a comer o tomar un café. Dios proveyó para cada cosa. Y la pasábamos genial! Dios me dió esa paz q’ sobrepasa todo entendimiento.
Mientras tanto, mi esposo seguía cada vez más hundido en la otra relación, si yo tenía suerte, me veía como una inquilina más en su casa, y otras veces era frío y grosero, pero a mi ya no me afectaba nada de lo que él hiciera porque Dios me había hecho una hermosa corona real en sus manos (Isaías 62:3). Entendí que el corazón de mi esposo no tenía paz y no podía ser feliz incluso con 2 mujeres a su lado, cada día iba cayendo en un pozo más profundo aunque él no se diera cuenta.
Meses seguían pasando y yo seguía contando los días, lo q’ no sabia es q’ Dios quería desarrollar la paciencia en mi, y quería sanarme en medio de la tormenta. Dios me mostró q’ no necesitaba q’ mi esposo regresará a casa para sanar mi corazón, porque esa sólo dependía de Dios, y de nadie más. Además me mostró la “falsa felicidad del pecado”: cada vez q’ mi esposo salía a ver a esa mujer, yo ya lo sabía ya q’ minutos antes su semblante cambiaba, se veía más triste y lleno de culpa y vergüenza. Incluso su postura era diferente, se encorvaba. Y ya no se arreglaba como antes, se ponía lo primero q’ encontraba y no se aseaba como al principio. Pero aun así no podía dejar a la OM. Estaba literalmente retenido con las cuerdas de su pecado (Prov 5:22). Aunque mi esposo trataba de aparentar otra cosa, mi Dios me mostró lo infeliz q’ era, y eso me dió esperanza de q’ Dios estaba a punto de abrir sus ojos. Solo era cuestión de tiempo. Así q’ empecé a orar por su salvación con mas fuerza q’ nunca.
Nunca le dije a nadie acerca de mi situación para evitar q’ todo mundo me diera consejos q’ solo me confundían, ni mi madre, ni mi mejor amiga, ni el pastor, nadie. Solo Dios y yo hablábamos de lo q me pasaba y fue una total bendición solo dejarme guiar por mi Ishi (“mi marido” de acuerdo a Óseas 2:16)
En diciembre mi marido me dijo sin ninguna clase de remordimiento y con total descaro q’ pasaría el 24 de Dic conmigo y el 25 con la OM, y lo mismo en Año Nuevo, un día conmigo y al siguiente con ella. Es verdad q’ cuando tú restauración está cerca, el horno ardiente de la prueba se calienta 7 veces más. Yo solo asentí sin decir nada, solo llevé la situación a mi Padre Celestial, diciéndole q’ hiciera un milagro en mi vida, un milagro en el corazón de mi esposo. Pero q’ de todas maneras iba a aceptar su voluntad xq sabía q’ si lo permitía era xq iba a ser estrictamente necesario para mi restauración y para nuestra salvación. Para ese entonces ya Dios me había hecho lo suficientemente humilde para aceptar su voluntad. Había llegado a un punto en el q’ me cansé de pedir. Recuerdo q’ en varias ocasiones solo le pedía al Señor q’ se sentará junto a mi mientras lloraba, no quería q’ hiciera nada más, solo estar cerca de mi.
El 24 de Dic llegó y mi esposo cenó con nosotros pero solo tomaba fotos (sin mi) para enviárselas a la OM (yo ya había llegado al punto de quitar mi vista de sus acciones y llevarlo todo a mi Esposo Celestial, todas mis dolencias y anhelos). Esa misma noche soñé q’ mi esposo me decía q’ iba a regresar a las 5pm. Al siguiente día mi esposo se fue e incluso compró regalos para el hijo de la OM. Nosotros no tenemos hijos, solo mascotas. Ese día pasó y él no regresó. Me sentí triste pero no descorazonada. Sabía q’ Dios era lo único q’ necesitaba, y si lo tenía a Él lo tendría todo, incluso el amor de mi esposo y que Él lo traería a su tiempo perfecto. Sabía q’ a pesar de todas las dudas acerca del libre albedrío, mi esposo y yo éramos una sola carne y si yo oraba por nuestra restauración, entonces sería como si los dos lo hiciéramos y Dios honraría el pacto q’ teníamos delante de Él.
Para mi sorpresa, el 26 de Dic en la mañana, mi esposo me mando un msj de texto desde la casa de la OM diciéndome q’ estaba sintiendo muy fuertemente en su corazón q’ Dios lo estaba llamando a dejar esa vida ¡Mi Dios había quitado las escamas de sus ojos! Yo le contesté: “Estoy segura de q’ vas a tomar la mejor decisión. Eres bienvenido” y nada más. Ese mismo día, vi q’ Él puso una petición de oración por nuestro matrimonio en la página de Facebook de nuestra iglesia!
Aunque me emocioné, no quise ilusionarme demasiado ya q’ otras veces me había dicho q’ iba a dejar a la OM y en cambio regresaba más “enamorado” de ella porque según él “Ella siempre tenía las palabras perfectas para él”, al menos eso me decía.
Al otro día regresó como si nada, no dijo nada ni yo tampoco. Mientras tanto, yo le pedía a Dios q’ pusiera las palabras en mi corazón q’ quería q’ yo le dijera a mi esposo y sólo las diría si él traía el tema a la mesa. Dios lo hizo.
Cuando mi esposo me preguntó q’ qué pensaba sobre lo q’ le había pasado, yo le respondí respetuosamente: “A mi me gustaría más que a ti q’ esta pesadilla terminara para siempre, pero cuando me has dicho q’ vas a terminar con ella, solo empeoran las cosas. A mi me gustaría más bien q’ me dijeras lo q’ ya hiciste y no q’ esto fuera un mero sentimiento”. Lo único q’ me respondió fue: A mi también.
Pasamos el 31 de Dic y el 1ero de Enero le pregunté si se iba a ir y me dijo q’ no, y q’ con la ayuda de Dios ya no volvería a ir nunca más!!! Solo me quedé callada y en shock agradeciéndole a mi Dios por tan grande milagro!
Me pidió q’ oráramos y en la oración él le agradeció a Dios por cambiar sus sentimientos!!! (algo por lo q’ yo había orado incansablemente y Dios cambió el corazón de mi esposo hacia mi!!!)
Después de varios días, lo veía q’ todavía se escribía con la OM, yo solo le pedía a Dios q’ me ayudará a controlar mis emociones y no dejará q’ mis celos y miedos arruinaran mi promesa. Después mi esposo me dijo q’ la OM no lo quería dejar ir, y le rogaba q’ regresaran.
Sospechabas o podías ver que estabas cerca de ser restaurada?
Para nada, como ya dije, ante mis ojos su relación iba perfecta y cada día lo veía más cerca de la OM y su familia. Fue un milagro súbito!
¿Recomendarías alguno de nuestros recursos en particular, que te haya ayudado Dinia?
Todos! Hacer el Plan de leer Salmos y Proverbios fue crucial ya que sentí que mi corazón sanaba instantáneamente al leer la Palabra de Dios.
Los 3 cursos son lo mejor que me pudo pasar, me guiaron a través de todo el proceso, el Libro de una Mujer Sabia, y por supuesto, los testimonios me dieron mucha esperanza en los momentos más difíciles.
¿Dinia tienes versículos favoritos de la Biblia que quisieras compartir con las mujeres que leen tu testimonio? O Promesas que Él te dio?
Cuando Jehová hiciere volver la cautividad de Sion, Seremos como los que sueñan. Entonces nuestra boca se llenará de risa, Y nuestra lengua de alabanza; Entonces dirán entre las naciones: Grandes cosas ha hecho Jehová con estos.” Salmos 126:1-2
“Bienaventurado el hombre que puso en Jehová su confianza, Y no mira a los soberbios, ni a los que se desvían tras la mentira.” Salmos 40:4
“Hubiera yo desmayado, si no creyese que veré la bondad de Jehová En la tierra de los vivientes. Aguarda a Jehová; Esfuérzate, y aliéntese tu corazón; Sí, espera a Jehová.” Salmos 27:13-14
“derribando argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo,” 2 Corintios 10:5
Por tu nombre, oh Jehová, me vivificarás; Por tu justicia sacarás mi alma de angustia. Y por tu misericordia disiparás a mis enemigos, Y destruirás a todos los adversarios de mi alma, Porque yo soy tu siervo.” Salmos 143:11-12
“Mis huidas tú has contado; Pon mis lágrimas en tu redoma; ¿No están ellas en tu libro? Serán luego vueltos atrás mis enemigos, el día en que yo clamare; Esto sé, que Dios está por mí.” Salmos 56:8-9
¿Dinia Estarías interesada en ayudar a animar a otras mujeres?
Por supuesto, lo hago cada que puedo a través de algunos grupos de Facebook.
De cualquier forma Dinia, ¿qué tipo de ánimo te gustaría dejarles a las mujeres en conclusión?
Ahora puedo decir q’ finalmente mi matrimonio ha sido restaurado. Mi esposo ha estado acercándose más a mi, y lo más importante, más a Dios, poco a poco. También me pidió q’ tengamos un bebé, nos abrazamos todas las mañanas y la intimidad ha comenzado de nuevo. Ya no esconde su teléfono y una vez se disculpó por ausentarse una hora ya q’ estaba hablando con la OM y arreglando las cosas! Solo Dios pudo hacer eso!
Mi esposo se mantuvo frio conmigo un tiempo recién regresó a casa emocionalmente, pero de acuerdo a muchos testimonios q’ ya había leído, sabía q’ tenía q’ darle tiempo para “desintoxicarse” de su vida anterior. Lo único q’ yo tenía q’ hacer es aferrarme más a mi Dios y todo lo demás vendría por añadidura. No tenía nada de qué preocuparme porque Dios terminaría lo q’ una vez comenzó.
Toda esta pesadilla fue para cambiarme, para acercarme a mi Creador y Redentor, para quitar de mi la idolatría q’ tenía hacía mi esposo, me tomó meses aceptarlo, pero cuando finalmente lo hice, mi Dios me perdonó y me dio mil oportunidades. Fue paciente conmigo y me ayudó a deshacerme de ese gran pecado.
Antes de mi crisis matrimonial, yo era esa mujer contenciosa, orgullosa, egoísta y me sentía superior a mi esposo intelectualmente, pensando q’ yo tenía siempre la razón en todo, además de creer q’ era más inteligente y sintiéndome orgullosa de mi independencia y de ganar todas las discusiones sin saber que lo único que hacía era alejar a mi esposo más y más, no me di cuenta de q’ el feminismo del q’ tanto me enorgullecía no hizo más q’ destruir mi matrimonio.
Dios en mi desesperación me mandó el libro de Cómo Dios puede y va a restaurar tu matrimonio y mi corazón hecho pedazos abrazó todas las verdades escritas en él. Primero cambió mi corazón, y después el de mi esposo para traerlo finalmente a casa física y emocionalmente.
Ahora mi esposo me dice q’ he cambiado y q’ finalmente se siente querido, nunca pensé q’ ese fuera el halago más grande q’ me pudiera dar. Ahora veo cómo Dios me ha cambiado y me siento feliz por eso. Soy una nueva mujer en Cristo, una corona de hermosura en sus manos y ahora puedo amar a mi esposo incondicionalmente como mi Ishi me ama a mi.
No necesito q’ mi esposo sepa lo q’ me hizo sufrir, Dios lo sabe y ya me dió mi recompensa, el pasado es pasado y Dios me ha quitado toda raíz de amargura, resentimiento y sed de venganza por que yo sé quién es mi Defensor y q’ en Él no hay injusticia!
No tuve q’ pelear esta batalla en la carne, nunca confronté a la OM, tampoco le rogué a mi esposo, solo miré cómo Dios peleó por mi! Y cuando me equivoqué y no hice lo correcto, Él amorosamente arreglaba el problema para su honra y su gloria. Todo lo q’ mi Ishi me prometió, lo cumplió. 
Quitó nuestro corazón de piedra y puso un corazón de carne.
Estoy y siempre estaré eternamente agradecida por su inmenso amor por mi, por permitir tal quebrantamiento para poder reconstruir mi corazón, por hablarme en los momentos en los q me sentía morir, por estar siempre a mi lado, especialmente en los días más oscuros (independientemente de q’ lo sintiera o no), por darme siempre una nueva canción de esperanza, por mantenerme tranquila y serena a pesar de todo el caos que estaba ocurriendo a mi alrededor, por conducirme al ministerio q’ me enseñó a ser una mujer sabia, a ser sumisa, a amar a mis enemigos, a dejar q’ mi esposo sea la cabeza del hogar y el líder espiritual, a diezmar (q’ por cierto vi grandes bendiciones en eso), a vivir la Vida abundante cerca de mi Señor a no confiar en mis ojos sino en la Verdad Absoluta de su Palabra, a obedecer sus leyes y mandatos con pasión, a amarlo con todas mis fuerzas y Él se encargaría de lo demás.
Nunca me cansaré de recomendar todos los libros, videos, devocionales y testimonios, Toda la gloria sea para mi amado Dios, por no fallarme, por darme esperanza, por mostrarme lo grande y poderoso q’ es a través de la Biblia, especialmente del libro de Salmos.
Gracias mi Señor por estar allí en ese momento, ahora y siempre. Por las batallas q’ juntos ganamos y por la última gran batalla q’ ganaste por mi y para mi, por amarme a pesar de lo imperfecta y débil q’ soy. Por la fuerza q’ me diste cuando creía q’ ya no podía más. Por equiparme con tu armadura para no creer las mentiras del enemigo.
Por cumplir tus promesas, no porque lo merezca, sino porque no lo merezco. Hay mucho más q’ crecer junto a ti, te amo, tu que sostienes mi corazón por la eternidad, mi hermoso Señor!
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Si usted o su esposo han regresado a casa, presente su testimonio para que podamos comenzar a animarla a continuar su Viaje de Restauración e invitarla a nuestras Reuniones de Zoom para novias restauradas.