No más un adicto

Por casi tres años había estado pidiéndole a Dios que ayudara a mi esposo a dejar la adición a las sodas azucaradas porque estaba fuera de control tomando entre 2 y 3 litros (67 a 101 Oz) de soda al día, ya sabía que diciéndole que no lo hiciera no iba a lograr nada y que necesitaba ganarlo sin palabras. Mi Esposo me enseñó que no podía juzgarlo en lo absoluto porque yo también era adicta al azúcar, no lo sabía, hasta que me llevo a disminuirla casi por completo de mi dieta!! Y si que sentí la abstinencia!! 😂

En lugar de juzgarlo oré cada vez que El me lo recordaba y cuando Federico me pidió comprarle sodas. Pero, en lugar de disminuir o de mostrar interés por dejarlas tomaba cada vez más y más. De repente, comenzó a tener dolores de cabeza de vez en cuando hasta qué pasó quince o veinte días con dolor de cabeza las 24 horas del día!!!! En mi corazón intuía que se debía al exceso de azúcar pero no dije nada. Esperé en silencio!! 🙌🏻

Cuando él visitó al neurólogo le dijo que tenía que dejar de consumir azúcar porque estaba cerca de una diabetes, alabado sea mi Esposo Celestial porque Federico lo tomó en serio!!! Reemplazó las sodas por agua y se está acomodando a mi dieta sin azúcar!!! 🙌🏻🙌🏻🙌🏻 mi Esposo nos está conduciendo a ser más como una sola carne 🙌🏻🙌🏻🙌🏻, y para gloria del Señor cuando intento regresar a subir un poco la dosis de azúcar regresaron los dolores de cabeza que le recordaron no salirse de la raya!! 😂😂😂 Amo como El lo hace posible y sin tener que decir una palabra 🥳🥳🥳

4 comentarios de “No más un adicto”

  1. Gracias por preguntar hermosa!! Estaba programado para llegar en el correo diario pero vi que algo pasó y no llegó el correo, así que llamaré a Poppy aquí para ver si ella puede ayudarnos a verificar qué pasó con Mailpoet, ya que no recibimos el boletín diario 😊 Creo que puede deberse a algunos cambios que hice ayer para introducir el plan de lectura de la Biblia en un año 🤭 🙏🙏🙏

  2. Gracias querida Anastasia por confirmar la fidelidad de nuestro Amado cuando somos obedientes y aplicamos el principio de Ganar sin una palabra. De evitar la tentación de sermonear a nuestro ET o familiares y solo correr a él con nuestras preocupaciones.

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