Testimonio de Matrimonio RESTAURADO: “No entendía lo que era enamorarse”

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¿Cómo comenzó en realidad tu restauración? 

Creía que no tenía esperanza, una joven embarazada de su novio, que se casan a escondidas, el novio se va a otro país y se cumple esa parte que dice “Porque como a mujer abandonada y afligida de espíritu, te ha llamado el SEÑOR, y como a esposa de la juventud que es repudiada - dice tu Dios” (Isaías 54:6), lo chistoso fue que en mi desesperación busqué a Dios, un amigo me regaló su Biblia y al orar y pedir respuesta, me salía este pedacito que comparto, me sentía triste por que aún no entendía lo que era enamorarse de alguien tan maravilloso como mi Esposo Celestial.

¿Cómo cambió Dios tu situación mientras lo buscabas a Él con todo el corazón?

Lo buscaba; pero al nacer el bebé vi a mi esposo terrenal después de 7 meses de no verlo y presioné tanto que arruine las cosas, hice todo lo que nos advierten que no hagamos; pero era una joven que se dejaba llevar por la carne, “Mi pueblo perece por falta de conocimiento” Oseas 4:6. Desesperada pedía a Dios ayuda clamando noche y día, mi situación parecía imposible, estaba dándome por vencida; así que busqué testimonios para alentarme, pensé que si alguien ya había pasado exactamente por mi situación entonces ¡tendría esperanza! Si, adivinaron, jamás encontré un testimonio que se pareciera a mi situación pero encontré a AyudaMatrimonial.com

¿Qué principios, de la Palabra de Dios (o por medio de nuestros recursos), te enseñó el Señor durante esta prueba?

El estar callada y acudir en todo a mi Esposo Celestial, el sentirme honrada de que Él me tomara como esposa.

¿Cuáles fueron los momentos más difíciles que Dios te ayudó a atravesar?

La otra mujer, el bebé y yo siendo rechazados y ocultados, el rechazo y el dolor.

¿Cuál fue el “momento crucial” de tu restauración?

Realmente tuvimos dos restauraciones una en la que yo sabía que no estábamos listos; pero yo insistía a Dios que iba a resistir y que Él transformara a ambos, a mi esposo terrenal y a mí; pero ya viviendo juntos; ¡gran error!, no resistí el saber de otra mujer, y lo mismo de siempre.

El momento crucial puedo decir que fue el nuevo bebé, pasó casi igual que con el primero, mi esposo terrenal no lo quería, lo que me enojó y terminó en que él se fuera de la casa y el aborto del bebé; pero ese fue el detonador de ese cambio.

¿Cuéntanos CÓMO pasó? Tu esposo sólo regresó por la puerta principal? 

No él no regresó, nosotros vivíamos en casa de mis padres, estando en pandemia yo tenía la excusa para no dejar que viera al bebé, había comenzado de nuevo los cursos, iba por el Curso 2, cada vez que abría mi Biblia, Dios me hablaba diciendo “Por tanto, ofrezcamos continuamente por medio de Él, sacrificio de alabanza a Dios, es decir, el fruto de labios que confiesan su nombre” (Hebreos 13:15). “Te ofreceré sacrificio de alabanza e invocaré el nombre de Jehová” (Salmos 116:17), yo le decía: "mi Dios no entiendo, si yo estoy muy feliz cómo ofrecerte eso", hasta que al fin deje ver a mi esposo terrenal a nuestro bebé y se lo llevó y yo sentí que me desgarraban el corazón, entré y lloré y luego recordé lo de los sacrificios de alabanza y alabé, y Dios me dio una respuesta; me hizo sentir más amada y feliz en paz, al regresar mi esposo terrenal me vio tan radiante que empezó a hablarme y se me quedaba viendo, ahí empezó todo, venía a ver más al bebé y llevarme con ellos.

¿Sospechabas o podías ver que estabas cerca de ser restaurada?

No, pues cuando creía que sí, las cosas se ponían muy mal, a veces creía que si estaba cerca, sobre todo cuando mi esposo terrenal empezó a hacer cosas románticas por mí que jamás había hecho y a decirme que me amaba, algo que él decía nunca haber sentido. Aunque un día mi Dios me habló de nuevo, me puso un Nuevo Nombre y ahora si estaba lista para ser Su esposa y me aferré con amor a Él, esto pasó cuando las cosas con mi esposo terrenal se pusieron muy mal, luego al aparecer de nuevo la otra mujer, yo callé, sospechaba que él la veía menos, pues ella quiso tener comunicación conmigo lo que no hice, luego mi Dios volvió a hablarme a prepararme para lo que iba a suceder; me dijo: “Oye, hija, y mira, e inclina tu oído; Olvida tu pueblo, y la casa de tu padre; y deseará el rey tu hermosura; e inclínate a él, porque él es tu Señor” (Salmos 45:10-11).

Lo que no entendía y cada vez que abría mi Biblia volvía a ver este versículo, a los pocos días con permiso de mi madre, estaba con mi esposo terrenal y nuestro bebé, mi madre se enojó y me dijo que llevaría mis cosas ahí por que no me quería más en su casa, yo la llamé y me dijo que no era un juego; dijo tantas cosas que me afligí, pensaba "¿que haré? a ¿dónde iremos el bebé y yo?", no resistí entré a la habitación de mi esposo terrenal (él estaba en la cocina) y me puse a llorar, él casualmente vió y me preguntó que tenía, creía que era por la conversación desalentadora de la noche anterior.

Luego le dije lo que pasó con mi mamá y me dijo: “quédense aquí”... salimos y yo seguía afligida mientras más tarde se hacía yo le decía a mi Esposo Celestial "¿que haremos? él solo nos tendrá una noche y las demás? Y solo estará con nosotros por obligación y no porque él así lo desee", lo curioso fue, que esto sucedió el día que me correspondía empezar el  Curso 3: CRS y ya había empezado a leer que estaba diseñado para preparar mujeres para su restauración, ¿que curioso no?... En fin, continúo, al estar afligida y hacerse más tarde y yo estar hablando con mi Esposo Celestial en mi mente, algo sonó en mi corazón “olvida la casa de tu padre y serás hermosa a los ojos del rey” entendí de inmediato que él estuvo diciéndome por muchos días el versículo que hablaba de esto y sentí una paz inmensa, supe que esto tenía que suceder pues mi Esposo Celestial así lo quería.

Aún faltan cosas que sé que mi Dios irá haciendo; pues Él es fiel, ahora cada vez que mi esposo terrenal sale en vez de entristecerme como antes, me alegro porque eso significa más tiempo con mi Esposo Celestial.

¿Recomendarías alguno de nuestros recursos en particular, que te haya ayudado?

¡Todos!

¿Tienes versículos favoritos de la Biblia que quisieras compartir con las mujeres que leen tu testimonio? O ¿Promesas que Él te dio?

“Regocíjate, oh estéril, la que no daba a luz; levanta canción y da voces de júbilo, la que nunca estuvo de parto; porque más son los hijos de la desamparada que los de la casada, ha dicho Jehová. Ensancha el sitio de tu tienda, y las cortinas de tus habitaciones sean extendidas; no seas escasa; alarga tus cuerdas, y refuerza tus estacas. Porque te extenderás a la mano derecha y a la mano izquierda; y tu descendencia heredará naciones, y habitará las ciudades asoladas. No temas, pues no serás confundida; y no te avergüences, porque no serás afrentada, sino que te olvidarás de la vergüenza de tu juventud, y de la afrenta de tu viudez no tendrás más memoria. Porque tu marido es tu Hacedor; Jehová de los ejércitos es su nombre; y tu Redentor, el Santo de Israel; Dios de toda la tierra será llamado. Porque como a mujer abandonada y triste de espíritu te llamó Jehová, y como a la esposa de la juventud que es repudiada, dijo el Dios tuyo. Por un breve momento te abandoné, pero te recogeré con grandes misericordias. Con un poco de ira escondí mi rostro de ti por un momento; pero con misericordia eterna tendré compasión de ti, dijo Jehová tu Redentor”. Isaías 54: 1-8

¿Estarías interesada en ayudar a animar a otras mujeres? 

Si.

De cualquier forma, ¿Qué tipo de ánimo te gustaría dejarles a las mujeres en conclusión? 

Yo se que a veces las cosas se ven difíciles; pero para Dios no hay nada imposible, Él es bueno y fiel; si lo hizo por mi una mujer demasiado pecadora, con un bebé resultado de la fornicacion supuestamente sin amor, más un aborto provocado. ¿Crees que por ti no puede obrar?

No hay ninguna situación difícil para Dios, y Él es misericordioso, nos entiende aun cuando sientas que no eres merecedora. Sí, quizá nadie en el mundo lo es; pero Él nos ama y tiene misericordia de nosotros así que nos atiende, con Él puedes vencer.

~Otilia