Este es un testimonio que tomé tiempo en compartir, por uno y otro motivo, pero lo quiero hacer para mostrar el poder de Dios y lo que ÉL puede hacer en nuestra vida.
Cuando me enteré sobre la existencia de OM (otra mujer), fue un golpe muy duro que me consumió en una fuerte depresión, me sentí traicionada no solo por el hombre que tanto amaba sino también por la familia de él, para ese momento ya me había peleado con la hermana y mamá de él por un mal entendido, llevaba meses de no verlas ni tener ninguna comunicación con ellas, estaba enojada y no tenía intención de volver a verlas nunca más sobretodo cuando supe que ya sabían de la OM y parecían apoyarlo, pero mi amado tenía otros planes para nosotras, cuando conocí de RMI Y Dios tocó mi corazón supe cuánto había fallado también, cuan contenciosa había sido y que muchos de mis errores fueron los que me llevaron a estar en esa situación, comenzó el camino del perdón y quería seguir al pie de la letra cada lección de los cursos. Así fue como supe que no era correcto seguir peleada con la familia de él y por más que me hubieran lastimado con lo que pasó, decidí dejar atrás eso y buscar la reconciliación, eso fue algo que aprendí de mi amado, que muchas veces tendremos que pedir perdón y aceptar nuestra parte de culpa aunque la otra persona no lo haga, recuerden que lo hacemos por obediencia y eso es lo más importante.
Pues mi amado puso una oportunidad en la cual tuve que hablar con la que era mi cuñada para que cuidara a mi bebé, al inicio ella ni me miraba, supongo que pensó que yo también le hablaría con indiferencia y me iría, fue ahí que derramé mi corazón, le pedí perdón por las cosas pasadas, le expliqué que me sentí traicionada por algo que ella hizo, que pensé que lo hizo por fastidiarme por eso reaccioné así pero que quería dejar todo atrás, que lo que había pasado con su hermano realmente me dolió muchísimo y estaba tratando de componer mi vida, que había conocido del amor de Dios y que él me había cambiado.
Fue ahí que su cara cambió y me miró con amabilidad, esa pared que había entre nosotras cayó, me dijo que nunca quiso fastidiarme y que ella sabía de la OM, pero que no estaba de acuerdo. Fue tan liberador soltar ese rencor, me fui de ahí en paz conmigo misma y desde ahí nos llevamos cordialmente, incluso hace poco tuve una prueba respecto a eso, Dios probó mi corazón a ver si realmente la había perdonado, pues tuve que ayudarla con algo, lo tenía a mi alcance en ese momento así que no dude en hacerlo, a pesar de que ya no es mi cuñada ahora puedo decir que somos amigas.
En el caso de la mamá de mi ex pareja pasó igual, me acerqué a conversar con ella y explicarle que ya sabía de la OM pero que no haría problemas y que tenía las puertas abiertas de mi casa cuando quisieran ir a ver a mi hija, desde ahí me llevo bien con ambas, eso ha hecho que me hayan invitado a su casa y me traten con cariño, me han ayudado con mi hija también varias veces pero sobretodo es hermoso para mí que mi hija vea que me llevo bien con su tía y su abuela, que hay armonía con ellas y su papá, todo eso fue gracias a mi amado, él pudo cambiar mi corazón y enseñarme que el rencor nunca es la salida, pero también me hizo entender que para que las situaciones cambien depende también de nosotras cambiar ciertas cosas, no tendría tan buena relación con ellas si no hubiera dado yo el primer paso, espero que puedan aplicarlo ustedes para todas las relaciones que se encuentran quebradas en sus vidas, Dios nos llamó a vivir en paz con todos siempre es lo mejor ya lo verán.
Sus Promesas
El que perdona la ofensa cultiva el amor; El que insiste en la ofensa divide a los amigos. PROVERBIOS 17:9
~ Louan