♕ La Promesa del día: "Que su amabilidad sea evidente a todos. El Señor está cerca. 6 No se inquieten por nada; más bien, en toda ocasión, con oración y ruego, presenten sus peticiones a Dios y denle gracias." Filipenses 4:5-6
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Josefa, ¿cómo empezó realmente tu restauración?
Bueno, siempre tuve problemas con los celos y a principios de este año, hubo muchos cambios en mi trabajo. Momentos en los que sufría injusticias y terminaba yendo a trabajar de noche para evitar los conflictos que sucedían durante el turno de día. Pronto me volví amargada y malhumorada. Mi vida se convirtió en un ciclo de quejarme de mi jefe y quejarme de lo mal que estaba mi vida. Como comencé a estar sola todo el día, porque trabajaba en el turno de la noche, comencé a pensar solo en mi esposo José, y comencé a obsesionarme con él, acusándolo de no quererme más, de no prestarme suficiente atención, hasta que el día que estaba en el trabajo, y comencé a molestarlo con una serie de mensajes molestos. Debido a que estaba ocupado lidiando conmigo, recibió una advertencia en el trabajo. Esa noche empacó sus cosas, me dijo que me bloqueó en su teléfono y salió de la casa, diciendo eso porque me quejaba tanto de que él ya no me amaba y probablemente nunca me amó. Lo último que gritó antes de dar un portazo fue "¡¡¡Déjenme en paz!!!"
¿Cómo cambió Dios tu situación, Josefa, mientras lo buscabas de todo corazón?
Al principio, como todos los testimonios de matrimonios restaurados que he leído, oré todo el tiempo por la restauración después de que José se fue. Pronto descubrí RMI (Ministerios de Restauración Internacional) cuando alguien compartió RMI y Amoralfin.com en una publicación de Facebook. ¡Ni siquiera fue una respuesta a lo que publiqué, solo vi a alguien más preguntar y una amiga mía le respondió! Al día siguiente, reuní a un grupo de mujeres de mi país para comenzar a estudiar el RSM [Como Dios puede y va restaurar su matrimonio] a medida que cada una de nosotras comenzaba sus propios Viajes de Restauración.
No pasó mucho tiempo antes de que leyera una publicación en el animador que comencé a buscar mi propia restauración personal . Empecé a querer amar al Señor con todo mi corazón. Empecé a pedirle que me permitiera encontrar la paz que sobrepasa todo entendimiento porque yo no quería vivir de acuerdo a las circunstancias como siempre viví, y la forma en que las cosas estaban sucediendo en mi vida. Poco a poco dejé de contar los días en el desierto y comencé a disfrutar los momentos en casa a solas con nuestro Hermoso Señor. Una vez que Él se convirtió en mi EC (Esposo Celestial) y yo era realmente una novia, ¡cambié de un Viaje de Restauración a un Viaje de Vida Abundante!
¿Qué principios, de la Palabra de Dios (o a través de nuestros recursos), Josefa, te enseñó el Señor durante esta prueba?
¡Leer y conocer la Palabra hace toda la diferencia! Cuando tienes un problema, todas las personas que te rodean te darán consejos estúpidos para alimentar tu carne. En cambio, apliqué todo lo que aprendí, y lo primero fue llevar todo a Dios primero. Lo siguiente fue ser fiel en el diezmo de mi almacén después de que dejé mi iglesia. Empecé a alabar a Dios incluso cuando todo parecía desmoronarse. También nunca hablar mal de mi esposo a otras personas. La última fue cuando elegí obedecer y someterme a la autoridad de José, incluso durante la separación.
¡Dios realmente me probó cuando tuve que obedecer hasta el punto de comprarle un auto a mi esposo, en mi nombre! Solo teníamos un automóvil, que conservé cuando me mudé. Y debido a algunas restricciones, no podía ponerlo a su nombre, así que me pidió este favor. En mi cabeza parecía que todo empezaba a empeorar porque ahora tendría un auto para divertirse y vivir una vida de soltero. Empeoró cuando comencé a escuchar que iba de una OM a la siguiente, mudándose y “viviendo la vida”. Sin embargo, elegí confiar en Dios y Su Palabra, ¡y hoy soy yo quien conduce ese auto con José!
¿Cuáles fueron los momentos más difíciles en los que Dios te ayudó, Josefa?
Los momentos más difíciles eran los fines de semana cuando en casa no había más que soledad, pero Dios la usó para bien. Me estaba mostrando que estaba allí conmigo. Pronto comencé a salir de la casa y hacíamos cosas, solo yo y mi Amado.
Otra cosa que me molestaba mucho era ver a mi esposo a veces en mi calle porque se volvió a vivir a casa de mi suegra después de que se cansó de vivir con la om (otra mujer). Así que vivíamos en el mismo barrio. Fue difícil cuando llegué a casa y lo veía pasando el rato. Lo único que hice fue llevárselo a mi EC, diciendo que no quería verlo andar por ahí sin su "otra mitad" porque somos una sola carne. Pronto respondió también a esta inquietud, ahora nadie nos ve separados.
Josefa, ¿cuál fue el “punto de inflexión” de tu restauración?
¡Comenzó cuando comencé a descansar en Dios! Empecé a no mirar mi situación y empecé a estar agradecida por todo lo que tenía. Hice nuevas amigas que también confiaban en Dios para la restauración de sus matrimonios y luego cambiaron a solo quererlo. Cuando aprendí a entregarme totalmente a mi EC, dejando mi restauración a Dios para que me restaure “si era su voluntad” y permitiéndole cambiar en mí en todo lo que no le agradaba. Creo que el punto de inflexión final fue cuando rotundamente no quería ser restaurada. Es casi como si Dios estuviera esperando y le dijera a mi EC: “Está bien, ahora está lista” jajaja.
Cuéntanos ¿CÓMO sucedió, Josefa? ¿Su marido solo entró por la puerta principal? Josefa, ¿sospechaste o pudiste decir que estabas cerca de ser restaurada?
Mi esposo había hecho nuevos "amigos" en el trabajo, todos estaban separados y que querían vivir la vida de los adolescentes, vivir juntos, jugar videojuegos, estar con mujeres, etc. Rezaba mucho para que Dios le mostrará que esto no era así, la vida que lo llevaría a cualquier parte y Dios hizo lo que le pedí!
Estando de vacaciones, José me invitó a almorzar con él y mis suegros, y fue entonces cuando me dijo que quería volver a intentarlo. Al principio, no quería volver a casa, solo quería que fuéramos novio y novia. Como sabía que necesitábamos cambiar como pareja, confié en Dios y acepté. Al principio me dolió que me llamara su novia y que viniera a nuestra casa y luego se fuera a dormir a casa de sus padres. Varias veces tuve que morderme la lengua para no exigirle nada, y tal vez esa fue mi mayor prueba. No tenía que importarme.
Esto continuó durante algunas semanas, pero tan pronto como desvié mi atención de José nuevamente y permanecí enfocada en mi Amante, comenzó a dormir en casa y gradualmente regresó cada vez que traía su ropa. Esta transición fue perfecta porque pude mantener mi EC primero y tener suficiente tiempo para estar a solas con Él.
¿Recomendarías alguno de nuestros recursos en particular que te haya ayudado, Josefa?
Sí, leí los libros Cómo Dios puede y restaurará su matrimonio, Una mujer sabia, Preguntas y respuestas, y también tomé un curso de RMI todos los días y vi los videos de Ánimo más de una vez al día desde mi teléfono. Llegué a conocer los RMT (Testimonio de Restauración) y cómo se veía realmente la restauración y qué provocó que sucediera: ser solo suya.
¿Te interesaría ayudar a animar a otras mujeres, Josefa?
¡Seguramente! ¡Debemos consolar a otros con el consuelo que hemos recibido de Él!
Sea como sea, Josefa, ¿qué tipo de aliento le gustaría dejar a las mujeres, en conclusión?
¡Amadas, crean sólo en Dios! A partir de ahí, podrás descansar y empezar a buscarlo como Él quiere ser encontrado. Yo particularmente no pude encontrarlo como mi Esposo Celestial, sino porque a la edad de 9 años perdí a mi padre, que fue el hombre más recto que he conocido. Así que cuando conocí al Señor, Dios vino a suplir mis necesidades para que tuviera un padre cariñoso, un Padre Celestial. Por mi parte, decidí seguir por ese camino, que era lo que siempre más necesité. Fue entonces cuando me di cuenta de que Él podía convertirse en mi Amor Celestial y encontré el consuelo que necesitaba. ¡Así que busquen a Dios con todo su corazón y permitan que Él les hable a sus corazones y el resto lo hará Él! ¡¡Deja que sea Él quien necesites en tu vida!!
Lea MÁS testimonios en nuestra serie completa Por la palabra de su testimonio.
¿Está SU Matrimonio RESTAURADO?