♕ La Promesa del día: “Aunque mi padre y mi madre me dejaran, con todo, Jehová me recogerá.” Salmos 27:10
De ~ Valeria en El Salvador
Queridas novias, hoy quiero compartir con ustedes un TA (Testimonio de Alabanza) a mi amado EC (Esposo Celestial), por una lección muy importante que aprendí ahora, no tiene nada que ver con la restauración de mi matrimonio sino más bien con un sentimiento que me ha perseguido por años, y es el de sentirme rechazada por mi padre terrenal.
Cuando yo tenía 2 años, mis padres se separaron debido al adulterio de mi papá, lo que llevó luego a un divorcio, mi papá llegaba ocasionalmente a vernos a mi hermana y a mí, pero casi siempre llegaba alcoholizado, por lo que un día finalmente mi madre le pidió que si seguía llegando así, que era mejor que ya no llegará porque mi hermana y yo estábamos muy pequeñas y nos asustaba mucho, después de eso él simplemente desapareció de nuestras vidas.
Siempre me pregunté, ¿por qué no fui suficiente razón para que él se quedara? Para que luchara por nosotras, para que nos buscara, se preocupara de nuestro bienestar, ¿por qué fui rechazada para siempre..?
Este día como traductora al español de este hermoso Ministerio, se me asignó traducir un texto que se llama "Rechazada para siempre" y finalmente lo comprendí, que aunque nunca entenderé las razones humanas que tuvo mi papá terrenal, entendí que Dios me apartó, a mí, para siempre, para prepararme para lo que ahora estoy viviendo, para prepararme para TODO lo que he experimentado durante mi viaje de restauración.
Finalmente comprendí que aunque mi padre me rechazó, mi Dios me recogió, me apartó y me ha santificado por la sangre de su hijo, ha suplido todas mis necesidades conforme a sus riquezas, hasta este día no me ha faltado nada y gracias a mi Dios tuve una madre que se esforzó más allá de lo natural, para que nos sintiéramos seguras y protegidas.
En mi país se celebró el día del padre la semana pasada y siempre que llega esa fecha me ponía triste pensando en mi papá, en su decisión de dejarnos y el sentimiento de ser rechazada para siempre volvía a mi mente y a mi corazón, pero gracias a mi Dios creo que este será el último año en que piense en ello, porque ahora he comprendido que Dios tiene para mi vida un propósito más grande del que puedo imaginar.
Mi EC me está bendiciendo de muchas maneras a través de este Ministerio, no sólo en mi viaje de restauración, sino que he podido ver su mano moverse en mi vida de una forma sobrenatural y más ahora que he estado como voluntaria de este Ministerio. Alabado sea su nombre por los siglos de los siglos.
Dios me mostró que el abandono de mi padre terrenal no debo asumirlo como algo negativo, sino como algo que obró para mi bien, que me ayudó a prepararme para todo lo que he vivido en mi viaje de restauración y que he sido apartada para ÉL.
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