- Testimonio de algo que Dios hizo al contestar una petición*
Desde que tengo conocimiento de que le creí a un Dios de lo imposible, sabía que esa era una realidad, hubieron oraciones que fueron contestadas a la manera de él, pero lo hizo.
Y está fue una de esas en que clara y definitivamente pude ver que era Dios quien estaba enmedio de ello. Pues verán: esto se remonta a 11 años atrás cuando yo aún trabajaba fuera de casa. Mi ET y yo teníamos turnos opuestos, él trabajaba por la noche (10pm a 6am para ser exactos), y yo 6:30am-3pm.
Y a la llegada de mi hija, mi ET me pidio que dejara de trabajar para dedicarme al cuidado de mi pequeña, y las que trabajan me *entenderán*, yo usaba varias excusas para no hacerlo: primero (según yo) no quería estar en casa y tener que limitarme al silencio para que mi ET pudiera descansar (no olviden que El dormía durante el dia) y no sólo eso sino que temía que el llanto o el ruido que mi hija hiciera lo despertara.
Segundo: pensaba que perdería los beneficios que el hospital me daba, yo creía que eran muy buenos.
Tercero, extrañaría el cheque.
Cuarto: no queria estar en casa y tener que aguantar su mal humor. De hecho yo le había pedido que buscara un turno mejor antes de yo salirme, lo cual era motivo de irritación para él.
Antes de que mi hija llegara ya teníamos discusiones, pero yo las atribuía a la falta de descanso de mi ET, pues no descansaba igual que si dormía en la noche como es normal, para mí ese era el problema, pues aunque trabajaba yo me esforzaba en cumplir en casí todo, pero bueno yo había dejado un espacio grande.
Entonces, volviendo a cuando él me pide que deje de trabajar, un fin de semana, unos familiares volarían desde otro estado para visitar, y nosotros viajariamos para ahorrarles la vuelta y nos reuniriamos en un punto medio con el resto de la familia. En el trayecto, yo conducía, pues nos fuimos tan pronto él llegó a casa esa mañana después de trabajar, y la idea era que él descansara, pero no, él iba super irtitado, todo le molestaba (esto yo lo había notado ya). Realmente nunca me paso por la cabeza que hubiera OM.
Bueno en este viaje yo iba muy tensa, trataba de no hacer nada que le irritara, le molestara, tener cuidado al conducir y al mismo tiempo asegurarme de que la niña estuviera bien. Hubo un momento en que no pude y decidí virar el volante y conducir de regreso a casa, cuando él se da cuenta, me pregunta: qué haces?
Voy para la casa, no tenemos que ir, es mi familia no tienes que ir, o por lo menos así no, estoy cansada de que siempre tengo que hacer creer a los demás que todo está bien entre nosotros cuando no es así y de que tú sólo te la pases durmiendo todo el tiempo. Estoy cansada de tu actitud, no puedo más con esta situación o buscas otro turno o… no sé que va a pasar, le contesté.
Me miró fijamente y al fin dijo: espera, dale para donde ibamos y te prometo que haré mi mejor esfuerzo, pero vamos a visitar a la familia.
Para este momento ya no dije una palabra, me incliné en el volante, respirè profundo y desde lo más profundo de mi corazón clamé: Señor, no puedo más, haz lo que tengas que hacer, pero consigue un mejor turno de trabajo para mi esposo y (condicioné a Dios) entonces yo dejo de trabajar. Te dejo este asunto en tus manos. Fue todo. Me sequé los ojos, respiré profundo otra vez y le dije: está bien, vamos.
La semana de trabajo de mi ET era del Domingo al Jueves todos los dias de las 10 de la noche a las 6 de la mañana y el mío era de Lunes a Viernes de las 6:30 m a las 3pm.
Al regresar de este viaje yo tenía programadas dos semanas de vacaciones para ir a visitar a mi madre que vive en el extranjero, y con la aprobación de mi ET lo haría.
Al regresar, mi departamento había hecho la reunión del mes y ocurrieron cambios. Cambios que al principio no me agradaron. Uno de ellos era que ahora yo tendría que trabajar algunos fines de semana, me quejé, les dije que yo no podía, que yo necesitaba el fin de semana para mi familia y el Domingo para ir a la iglesia, pero la respuesta fue que, todos en mi departamento tomariamos turnos. En ese momento recordé lo que le había pedido a Dios en mi oración desesperada. Por un momento dude hacerlo, pero me armé de valor, y aunque condicioné a Dios, pensé que Dios estaba permitiendo estos cambios para yo salirme de trabajar, pues le pedí que hiciera lo que tuviera que hacer, y pensé: quizá esto es lo que él quiere. Y ahí mismo le dije a mi supervisora que entregaba mi renuncia, lo cual no aceptó con mucho agradado, y me dijo, piensalo bien y si el último día cambias de opinión, aquí está tu trabajo . Osea que la tentación estaría ahí todavía.
Se lo comuniqué a mi et lo cual tomo de lo más normal. Era el Vienres. El Domingo antes de irse trabajar nos despedimos 15 minutos antes de que se fuera, de pronto (ya en mi recamara) oigo que suena el teléfono, después de él hablar con alguien viene y cabizbajo, preocupado y me dice que le llamarón para decirle que no fuera esa noche a trabajar y que se presentara a la mañana siguiente que era el Lunes
Mi reacción fue serena, tranquila y dije con una sonrisa “Dios me ha contestado”, él me miraba atónito y al fin dijo: yo no estaría tan tranquilo. No te preocupes, mañana te presentas y no digas nada, sólo haz tu trabajo, le dije. Así pasaron varios días y él decía: todavía no entiendo por qué ésta gente me tiene aquí, me siento mal porque no estoy haciendo nada prácticamente, me están pagando lo mismo y no tengo personal (El era en ese tiempo supervisor de mantenimiento y su equipo se quedó en el mismo turno), me siento incómodo. Si ellos no te dicen nada, no queationes, contesté.
Bueno, así en otro viaje más o menos al mes, hablabamos de lo mismo y le dije: tú buscas lógica humana y esto no es así, esto vino se arriba, señalando con mi dedo el cielo. Bueno, tengo que admitir que Dios te escucha, así que necesitas tener cuidado con lo que pides, dijo.
Ésta fue una de esas veces donde claramente no sólo yo, sino que mi ET también tuvo que admitirlo. Y como que sólo lo estaban probando, al cabo de unas semanas le preguntaron que, si contrataban gente para que él pudiera tener su propio grupo otra vez, que si él estaría dispuesto a quedarse definitivamente en el turno del dia de 6am a 3pm?
Cuando me lo comentó, me emocioné tanto que sólo dije: les dijiste que sí verdad?
Bueno, les dije cuales eran “mis excusas”; y para la honra y la gloria de mi EC, ni siquiera un sólo día tuve que estar en casa tratando de guardar silencio para que mi ET pudiese dormir, y al fin de mis dos semanas de aviso de renuncia, aún en el último día, me preguntaron, estás segura?
Sí, Dios nunca me ha abandonado, cuando a medias le creí, pensé, estoy segura que no lo hará ahora que estoy dejando todo en sus manos, y bueno han pasado 10 años desde que deje ese trabajo. Y hasta el día de hoy, él ha sido fiel y si alguien tuviese una duda, le diría, quién si no fue Dios?. Cabe mencionar que mi ET es un gran hombre, es super talentoso y se ha ganado el respeto y la confianza de sus superiores que hoy ocupa otra posición de mayor responsabilidad y por consiguiente mejor remunerada. So gloria a Dios!!!
~Maria
La segunda parte continua el proximo sabado