REBELION EN EL CAMPAMENTO Y ATAQUES ESPIRITUALES – PARTE III – ATAQUES ESPIRITUALES: REVELACIÓN, CONSUELO Y ENSEÑANZA

Tres días después me llegó de parte de mi Amado REVELACION, confirmación de lo que había pasado, y la EXPLICACIÓN a mi pregunta “¿Es esto un ataque espiritual?” cuando escuchando el vídeo 4/1 de Erin de Estar Animada ella menciona claramente como la rebeldía es pecado de adivinación y cómo esto da lugar a ataques espirituales. A parte de vuestras amorosas y sabias contestaciones al TA (Testimonio de Alabanza). 🥰

“Pero Samuel le dijo: «A Dios le agrada más que lo obedezcan, y no que le traigan ofrendas. Es mejor obedecerlo que ofrecerle los mejores animales» Rebelarse contra Dios es tan malo como consultar a brujos y a adivinos. No está bien adorar a dioses falsos, ni tampoco desobedecer a Dios. Como tú no quieres nada con él, Dios tampoco quiere nada contigo».” 1S1522

Dios es tan bueno que durante el ataque -o la rebelión en mi campamento- no me dejó nunca. Él estaba ahí, mi Amado también, pero yo no podía sentirlos, desde luego no con fuerza. Pero clamaba, pedía con todo mi corazón poder volver a ellos y cada vez más Su Amor me fue atrayendo de nuevo bajo Su protección y terminé saliendo de la oscuridad.

Creo que es importante explicar que os cuento que clamé y clamé no para jactarme de lo buena que soy, al revés, sino para que sepáis que, por mucho que la hayáis embarrado, no dejéis nunca de volver a Él y de clamarle con todo vuestro corazón, aunque sintáis una vergüenza terrible y haya una fuerza que os esté diciendo que no va a cambiar nada, que sois inmundas y que por vuestro pecado estáis ya separadas de Él pues no tenéis remedio. Eso es mentira, clamad y clamad, lo que haga falta y pronto veréis como Él ha estado ahí todo el tiempo del ataque, sin moverse y es en vuestro clamor a Él que os estáis alejando de la oscuridad y caminando de nuevo hacia la luz. No dejéis nunca de clamar y de pedirle ayuda por mucha vergüenza que sintáis.

Él, en Su Amor infinito, me dio esta palabra de CONSUELO durante esos días, y no os imagináis cómo me alentó para seguir clamándole y buscándole:

“Muchos de los que pertenecían a las tribus de Efraín, de Manasés, de Isacar y de Zabulón no se habían preparado para la Pascua, pero de todos modos participaron de la comida de la fiesta. Entonces Ezequías le pidió a Dios que los perdonara. Le dijo:
«Dios, tú eres bueno, y por eso te pido que perdones a todos estos, que no han cumplido con la ceremonia de preparación; ellos han venido a adorarte con toda sinceridad, porque saben que tú eres el Dios de sus antepasados». Dios escuchó la oración de Ezequías y perdonó a esa gente.” 2C301820

También me llevó al Salmo 32 para confirmar su postura: “Mientras no te confesé mi pecado, las fuerzas se me fueron acabando de tanto llorar. Me castigabas día y noche, y fui perdiendo fuerzas, como una flor que se marchita bajo el calor del sol. Pero te confesé mi pecado, y no oculté mi maldad. Me decidí a reconocer que había sido rebelde contigo, y tú, mi Dios, me perdonaste.”

Sí, como le estaba buscando con sinceridad después de mi error, a pesar de mi impureza, El me perdonó y me ayudó a salir de la situación.

Esto no significa que podamos seguir cayendo en rebeldía como si nada y luego volver a Él, arrepentidas y así eternamente… para mí esta sensación fue tan horrible que, aunque lo más seguro es que vuelva a tener fallos, ya no me lo tomo más a la ligera pues se me ha quedado grabado el sufrimiento de sentirme tan apartada de Él.

Esta experiencia también me ENSEÑÓ lo fácil que es que una parte de nosotras se quede con restos del botín y lo esconda, lo fácil que es que el orgullo se mantenga oculto en nuestro corazón y nos noqueé cuando menos lo esperamos.

Como El Señor ordenó a Josué, (J714) presentemos también nosotras regularmente a todas las tribus de nuestro campamento delante de Él para que Él nos señale en qué tribu, en qué clan y en qué familia y qué hombre se ha guardado parte del botín que Él había ordenado exterminar. Y una vez señalado, entreguémoslos al fuego con todas sus pertenencias.

En mi caso, la de “justicia propia” es la tribu más floja y es la que se quedó con parte del botín del orgullo, tras la victoria de Jericó este verano.

Y el orgullo siempre es el botín, pues es la raíz de todo, es lo que alimenta a las tribus en su confusión, la razón que permite que todas estas tribus vivan en nosotras en su lado más oscuro: el miedo se alimenta del orgullo, la ofensa, del orgullo, la avaricia, del orgullo, la mentira, del orgullo, la soberbia, claramente del orgullo, la división, del orgullo, el apego, vive del orgullo, la escasez, vive del orgullo que es la separación de Dios….

Todas nuestras tribus en sus debilidades se alimentan del orgullo, engañadas por la creencia de que lo necesitan para sobrevivir, y por eso intentan quedarse con parte del botín cada vez que ganamos alguna batalla o hay oportunidad, porque se resisten a ser purificadas en nuestro campamento ya que, después de tantos años alimentándose del botín, es su forma de sobrevivir.

Y el orgullo por supuesto, anda como león rugiente, buscando alguna tribu a la que engañar para que lo acoja y lo esconda bajo tierra, debajo de su tienda (J721) y así poder permanecer en el campamento y eventualmente hacerlo todo suyo.

Queridas Novias: ¿Cuáles son vuestras tribus más peligrosas? ¿Se han quedado alguna vez alguna de ellas con parte del botín que teníais que haber entregado por completo al Señor tras una batalla ganada?

PD: las tribus pueden ser debilidades para el campamento cuando, poniendo en el botín su confianza, se guardan parte de éste, por pequeña que sea y escondida que esté. PERO también pueden ser fortalezas para el ejército, cuando obedecen al Señor y entregan TODO el orgullo al exterminio, poniéndose a Su servicio enteramente. Entonces podemos tener un campamento y un ejército fuerte y puro, capaz de obtener la victoria en El Señor en cualquier batalla.