“La restauración y todo lo demás será una añadidura”

Amadas, este camino comenzó por la restauración, mis oraciones, ayunos, acciones, deseos, planes e incluso mis lecturas de la Palabra estaban enfocados en una sola cosa: La Restauración.

Paso a paso, el Señor me fue guiando a través de ese desierto y me fue lavando de todo lo que me estorbaba para llegar a la meta. Cuando finalmente pude encontrar y aceptar a mi Esposo Celestial , mi vida dió un giro radical.

Comencé a amarlo, a conocerlo, a disfrutar mi caminar, se abrieron puertas que nunca imaginé y ni siquiera sabía que quería, llegaron bendiciones que no había pedido, las sonrisas volvieron, la risa que ya no había escuchado hace mucho tiempo de repente regresó, comencé a disfrutar cosas tan pequeñas como ver un atardecer y vi lo maravillosa que es la vida junto a Un Esposo tan increíble y perfecto como el Señor. Desde que pasó eso, las cosas con mi esposo terrenal empeoraron notablemente y lo digo muchas veces, humanamente hablando ya no hay nada que hacer, pero yo ya no me muevo en lo humano, estoy en una dimensión de fe que se convirtió en algo real a partir de que yo comencé con mi Esposo Celestial.

Ahora donde los demás ven que ya no hay solución, yo veo esperanza y las promesas de Dios, la oportunidad perfecta para que Dios se manifieste y las personas vean que forzosamente  tuvo que ser Dios quien intervino, puesto que "humanamente" hablando, ya no era posible nada.Me gozo de que todos serán testigos del poder de mi Padre, sabiendo que en sus manos,  todos absolutamente todo, es posible. Con cada golpe que ha llegado, me he acercado más y más a mi Padre (Dios), a mi Esposo Celestial  y a mi amigo (Espíritu Santo); sé que son uno mismo pero siguen teniendo personalidades diferentes.

He llegado a un nivel tan íntimo con ellos que los propios cristianos me llaman loca.

Los amo demasiado, tanto que no sé cómo explicarlo con palabras.

Se han vuelto en mi razón de ser, mi vida entera, mi centro, mi todo, mi razón para vivir.

No soy nada sin ellos 3.

Hace días orando les dije.

¿Qué les puedo dar que no tengan ya?

¿Cómo complacer a alguien que es perfecto?

¿Qué puedo hacer por ti que ya hiciste todo por mi?

¿Qué te puedo regalar para agradecer todo lo que tú has hecho por mi?

No existen las palabras para describir el amor que les tengo y jamás podré darles algo para igualar lo que han hecho por mi, pero les doy mi vida y todo de mi, para que hagan su voluntad y su propósito en mi.

Ustedes pueden hacer lo que gusten, yo no vengo a cuestionar, solo vengo a amarlos y a hacer su voluntad, sé que no me piden muchas cosas pero los amo tanto que me nace entregarles todo lo que soy, todo lo que tengo para que ustedes hagan lo que quieran.

Mi Esposo Celestial es muy muy paciente, porque está dispuesto a hacer todo conmigo, lo llevo desde la mañana cuando dejó a mi hijo en la escuela, vamos platicando, él sentado en el asiento del copiloto, lo llevo a las plazas para que me acompañe a comprar ropa, vemos películas en la noche y le digo mi opinión, hemos bailado incluso, pues me encanta bailar aunque solo tenga 2 pasos .

Es tan bueno y perfecto que aunque sean las 3 am está ahí, dispuesto a escucharme. Jamás conocí este amor.

En este punto de mi vida, veo la restauración tan pequeña, aún la espero y a veces tengo que decirle a mi Padre que me recuerde porqué debo seguir esperando, ya que ahora me cuesta hacerlo. Pero lo que comenzó enfocado 100% en la restauración, se ha vuelto en una intimidad hermosa. Los amo completamente, los amo y lo he llevado a un nivel muy "loco" y no me importa que me llamen loca.

Jamás en mi vida había sido tan feliz, no sabía que podía ser posible cada día que vivo ahora.

Este camino fue tan duro al inicio pero ahora se ha tornado tranquilo, y lleno de mucha felicidad.Aún hay golpes y son duros, pero ya no voy sola y me Él ha sabido levantar.

Amadas, es mi deseo que todas puedan llegar a este nivel de amor y gozo.

Yo pensaba: Yo no podré llegar al punto de "no querer mi restauración".

Ahora estoy disfrutando este viaje y viviendo una felicidad que jamás en mis 28 años pude tener. Salmo 37:4

Deléitate en el Señor, 

y Él te concederá los deseos de tu corazón.

Amadas, oro por ustedes.

No tiren la toalla porque la felicidad no está en la restauración, está en la relación hermosa con Dios.

~ Joaquina from Mexico

Restored in Gracia