“Yo planté la semilla en sus corazones, y Apolos la regó, pero fue Dios quien la hizo crecer.” 1 Corintios 3:6
Al leer Pies de cierva en Lugares altos, lectura recomendada por el Ministerio y el cual recomiendo que lo lean, El Señor puso en mi corazón lo siguiente:
La semilla del Amor que Él planta en nuestro corazón no es la semilla más linda visualmente ni como nosotras pensaríamos Suave como el algodón para que no lastime nuestro corazón; por el contrario esa semilla es una espina afilada y al verla creo que sentiríamos temor al igual que la protagonista de la historia lo sintió, inmediatamente asociamos Espina = Dolor y es posible que huyamos y nos resistamos a que esa semilla entre en nuestro corazón, es lo último que queremos sentir más dolor del que ya hemos experimentado.
Pero esa semilla con forma de espina afilada es la que nos transforma, El Amor nos transforma, Su Amor nos cambia, pueda ser que al inicio sintamos temor al ver esta semilla pero dejemos que sea Plantada, esa semilla afilada se convertirá a su debido tiempo en una hermosa Rosa, llena de fragancias que se esparcen naturalmente y que atraen a multitud de personas.
No le temamos al dolor de ello precede los aromas más dulces los frutos del Espíritu Santo.
Querida esperanza gracias por este Testimonio, creo que mi Amado trata de decirme algo con este T.A.
Ayer y anoche en una de mis conversaciones con el, le hacía entender que yo no puedo querer a mi ex pareja como antes, que no me veía dándole ese amor que veo que muchas dan en sus testimonios de restauración, a mí se me hace imposible, y no puedo dejar de sentir algo de culpa cuando trato bien y amablemente a mi ex pareja . La mayoría de veces trato de alejarlo de ser lo más seca posible para mantenerlo lejos, entonces mi Amado me ha hecho comprender que como yo pido restauración con esa actitud, y ha tratado de hablarme de diferente forma y hacérmelo saber y leyendo tu T.A es otra confirmación de que mi actitud no es la correcta y que eso no le agrada al corazón de mi Amado E.C , pero sólo El puede poner en mi esa semilla de amor para que floresca en su tiempo perfecto.
Muchas gracias Esperanza. Dios continue derramando sabiduría y Bendiciones sobre tu vida.
Leer este libro en nuestro Club de lectura de RMIOU https://elanimador.com/smm/gr/#Clubs%20de%20Lectura%20Estudiantes%20RMIOU ha sido de gran bendición, este libro me ha cautivado por la forma tan precisa en que describe este viaje de restauración por el que atravesamos. Ciertamente amar duele y nos cuesta, pero afortunadamente todo lo podemos en el Señor que nos fortalece! Así que ánimo a todas a persistir porque somos Su obra, no te preocupes por nada pero ora por todo, esa es la forma en que soltamos la preocupación y recibimos Su paz que nos hace felices!!
“El amor y el dolor van juntos “…. Nos narran en el
Libro.
Para mí también ha sido un libro fascinante, tan enriquecedor y lleno de tanta verdad. Sintiéndome tan identificada en tantos rasgos de sus personalidad y reacciones mientras avanza por “diferentes “ caminos hasta llegar a esos lugares altos.
Esa parte que nos comentas mi querida Esperanza, de la semilla afilada del amor, fue la que me cautivó e hizo despertar en mí un gran interés por este libro, después de leer ese capítulo, no pude parar de leer todo el libro, (con las pausas correspondientes que mi amado me hizo hacer para desmenuzar y entender mejor).
Creo que es un libro extraordinario.
Gracias por compartirnos, la forma en que él te hizo ver esto.
“Porque no se trilla el eneldo con rastrillo ni sobre el comino se pasa una rueda de carreta, sino que el eneldo se golpea con una vara y el comino con un palo. El grano se tritura, pero no demasiado ni tampoco se trilla sin descanso. Se le pasan las ruedas de la carreta, pero los caballos no lo trituran.” Isaías 28:27-28https://www.biblegateway.com/passage/?search=Isa%C3%ADas%2028%3A27-28&version=NVI
La bendición de leer este libro en el momento exacto en el que el Señor me llevó a leerlo, me preparó para las nuevas pruebas que tenía que enfrentar. Primero recordando que, aunque no nos guste, la prueba implica un dolor al ser sembrada la Palabra en nuestro corazón, empezamos a sentir corrección, la certeza de que algo debe morir en nosotras para que podamos vivir en esa Palabra. Me recuerda que somos como el oro que necesita pasar por el dolor del fuego para refinarse, o como las piezas de barro que tiene que pasar por las manos de el Alfarero que lo deshacen para volver a elaborar algo nuevo y mejor; o como las semillas que necesitan ser trilladas para quedarse con lo bueno. No somos diferentes, aunque el dolor no sea atractivo el dolor es necesario para convertirnos en nuevas personas, y nuestro hermoso Hacedor sabe cual es la medida de nuestra espina, no todos nos enfrentamos a las mismas pruebas, pero sabeos que en medio de ellas, el Señor nos esta llevando por ahí por nuestro bien.