♕ La Promesa del día: “Porque los ojos del Señor están sobre los justos,Y sus oídos atentos a sus oraciones; Pero el rostro del Señor está contra aquellos que hacen el mal. ¿Y quién es aquel que os podrá hacer daño, si vosotros seguís el bien? 1 Pedro 3:12-13
Cuando El Señor aprueba nuestra conducta, hasta con nuestros enemigos nos reconcilia.
Amadas hermanas en Cristo quiero compartirles este pequeño testimonio de alabanza.
He tenido días difíciles en los que me sentí cansada de poner la otra mejilla y empecé a poner mis ojos en los pecados de mi ET, lo cual empezó a llenarme de rabia, sin embargo la Gracia de nuestro Amado EC es más grande que nuestra debilidad, Él es paciente para guiarnos, enseñarnos y corregirlos por su gran perfecto y eterno amor.
Me dejé llevar por mi carne y no aguanté más el callar y cedí a la tentación de discutir, el tentador presionó y presionó, hasta que accedí a argumentar y defenderme, todo esto fué necesario y permitido por nuestro amoroso y amado Señor para que me diera cuenta de que aunque he aprendido a soltar cada vez más y saber que no necesito a mi ET para vivir, pero que aun hay dolor y rabia en mi corazón, lo cual pongo cada día a los pies de Él, sabiendo que es amplio en perdón y misericordia y eso me trae gozo, pero también me confronto con estos sentimientos y aunque ya no hay ninguna condenación para los que estamos en Cristo, su deseo es liberarnos del estorbo que no nos deja avanzar para vivir en su plenitud.
También me mostró que yo estaba reprochandolo, que por su dureza de corazón lastimará emocionalmente a nuestros hijos, pero yo cuando cedí a la contienda dije cosas delante de mis hijos que dejarían mal a su papá y a mi como la víctima, farisea, por lo cual me llevó a pedir disculpas a mis hijos y hablarles de mi mal comportamiento y falta de respeto hacia su padre, pues mi deber como cristiana es guiarlos a amar a pesar de, y a orar por quienes los lastiman ,más si son su propia familia, pues así nos perdonó y nos perdona nuestro Dios Santo y lleno de amor.
Estuve orando mucho y pidiéndole que sane mi corazón y que me ayude a aprender y practicar los principios, no por mi ET sino por Él, por su amor, para su Gloria, para ser ejemplo a mis hijos. Después de orar me recordó una promesa de restauración y de alejar a todos los que me quieran avergonzar, y hacer mal y esto me ha hecho ver con compasión a mi ET y orar por él, porque sé que es amado por Dios y necesita su Gracia como yo la necesito cada día.
Ayer tuve que salir de mi casa, porque estuve a punto de tirar la toalla y de renunciar, pero preferí salir y orar y orar y Dios se ha encargado de todo, hoy me sentí con fiebre y dolor de cabeza y aunque mi ET no me hablaba. Estaba tranquila dejando todo en manos de Dios y más bien orando porque el Señor sane el corazón de mi ET de tanto dolor y amargura no sólo hacía mí, sino hacia todos los que le hayan hecho daño, para que viva en paz, la paz de Cristo.
Lo seguí atendiendo y sólo le dirigí la palabra para lo necesario y en la noche me recosté y me empezó a atender, no reproche a Dios cuando me sentí indispuesta y le dije tu tienes el control, luego mi ET me pidió que hiciera algo y al principio me negué, pero Dios me guió a sujetarme y vean todo El Señor lo usa para bien, me empezó a hablar como si nada y recordándome mi EC que cuando Él aprueba nuestra conducta hasta con nuestros enemigos nos reconcilia, que no debemos devolver mal por mal ni insulto por insulto y que todo lo que hagamos lo hagamos para El Señor y no para los hombres.