La Promesa del día: "Esforcémonos por conocer al Señor, hasta estar tan seguros en Él como de que el amanecer llegará". Oseas 6:3

Happy fall woman throwing leaves

Hace meses había escrito la primer parte de mi testimonio donde me encontraba en la brecha peleando por la restauración de mi familia, me aventuré en este viaje y redescubrí el amor tan maravilloso e indescriptible de nuestro amado EC , he de confesar que ya le conocía como Padre y sano los vacíos que había en mí por la ausencia de mi padre terrenal pero clame muchas veces para conocer ese amor de Esposo, quería vivir esa locura de la que tanto hablaban haciéndolo a Él tu proveedor, tu compañero, tu protector, tus fuerzas, ese deleite que te llena de Gracia, sentir esa llenura y esa reconexión con mi amado fue algo que me impulsó en esta lucha para continuar en la batalla.

Mientras yo buscaba sentirlo como mi todo, por otro lado el padre de mi hijo estaba luchando con ataduras de drogadicción y alcoholismo perdiéndose en un valle de oscuridad donde su corazón cada vez se endurecía más por el pasado, he de confesar que a pesar de las respuestas positivas que mi amado EC  me daba yo dudé muchas veces pues el panorama era turbio pero no desistí y me aferré a creerle y a descansar en su perfecta voluntad, un día sin más me encontraba en una dificultad con una herramienta de trabajo que se me había descompuesto y solo él había podido darle mantenimiento puesto que vivo en un pueblo y no hay muchos técnicos, él se ofreció a ayudarme con la condición de que solo vendría a repararla y se regresaría a la ciudad dónde está viviendo, por supuesto que moría por decirle que se quedara pero descanse en mi amado EC  y dejé que Él obrará en su corazón, cuando él regresó y vió a su hijo, su casa y la nueva mujer en la que Dios estaba obrando, no pudo más que llorar y decirme que esto es lo que él quería estar con su familia, pero tenía miedo de volver a los conflictos de antes, con esa mujer insegura y necia, yo solo callé y dejé que Dios trabajará.

En el tiempo en que él estuvo ausente yo pude cumplir un sueño que anhelaba desde hace tiempo, pertenecer al ministerio de alabanza y cuando él regresó pudo asistir a la iglesia y ver como me deleitaba alabando a mi amado y cada que él iba la palabra de Dios quebrantaba en su interior, de pronto un día me avisaron que no podía subir más y alabarle desde el púlpito, pues al haber él regresado automáticamente yo me convertía en pecadora pues estábamos viviendo fuera de orden puesto que no nos hemos casado, eso fué algo que me dolió en el alma y no por el hecho de ya no estar en el escenario si no porque había olvidado mi pacto con mi amado EC  dónde le prometí ser fidelidad y obediencia, entre en conflicto y me sentía aturdida pero fué ahí cuando Dios habló a mi corazón y me dijo -hay ocasiones en que las bendiciones llegan a nuestras vidas y nos volvemos conformistas en un estado que creemos es de descanso y no podemos quedarnos ahí en dónde creemos que todo está bien, como cristianos no dejamos de aprender y tenemos que esforzarnos día a día por hacer un exámen de conciencia y saber que falta, en que sigo fallando, que es lo que mi Amado espera de mí, la lucha continúa y tenemos que estar preparadas para el día en nuestro Amado venga por nosotras- así pues recordé que llevo orando 9 años para que esta relación se consume y podríamos hacer un pacto ante las leyes del mundo y de la iglesia y fué así como Dios tocó el corazón de el padre de mi hijo y por fin después de 9 años, después de varios intentos, por fin tenemos fecha para la boda.

Mis amadas la Gracia de Dios se manifiesta día a día en mi hogar, mi pareja ya no toma, se ha vuelto un hombre que ayuda en casa y se preocupa por su hijo mucho más que otras veces, no sé desanimen porque las cosas no salen como nosotros queremos, no dejen de creer. No sabéis que los que corren en el estadio, todos en verdad corren, pero sólo uno obtiene el premio? Corred de tal modo que ganéis. 1 corintios 9:24

DIOS PUEDE RESTAURAR TODOOOO!! y aún y si no restaurare mi familia yo le seguiré amando porque aún siendo una pecadora Él dio su vida por mí. 

~ Diana