¡Todo está en sus manos!

Mi testimonio es acerca de lo maravilloso que ha sido Jesús en mi vida, gracias a ÉL recuperé la alegría, paz, tranquilidad y las ganas de vivir, toda la gloria sea para nuestro creador y salvador. antes de acercarme verdaderamente a Dios yo creía que podía solucionarlo todo a mi manera, pero en realidad cometí muchos errores y esto solo me trajo graves consecuencias, llegó la tristeza, la desesperación y el reclamo hacia Dios de porque me pasaban tantas situaciones difíciles en mi vida.

Hace  aproximadamente 1 mes empecé a leer “Cómo Dios puede y va a restaurar mi matrimonio” Curso 1: RSM, “mujer sabia” Curso 3: CRS y estoy en el proceso de lectura de Encontrando la Vida Abundante, desde que empecé con estos libros, me he dado cuenta cómo ha cambiado mi vida, mi Señor ha tomado las riendas de todas esas situaciones por las que estoy pasando, y yo solo descanso en la paz que ÉL me da cuando aprendo de su palabra, cuando entro en mi clóset de oración y cuando soy obediente a él.

Estoy convencida que Dios es maravilloso, misericordioso y cumple cada una de las promesas que nos hizo durante nuestro quebrantamiento y arrepentimiento por todas esas cosas negativas que hicimos. Lo único que debemos hacer es confiar plenamente en su palabra y esperar ya que su tiempo es perfecto y cuando menos lo esperemos llegarán cosas maravillosas a nuestras vidas.

El enemigo espera el momento preciso para atacar la paz que hemos logrado gracias a nuestro Esposo Celestial, nos ataca por medio de malos pensamientos, situaciones difíciles intentando que nuestra fe se vaya al piso y tiremos la toalla, pero es aquí donde debemos aferrar más nuestra fe a Jesús y pedirle que nos acompañe siempre.

Ahora entiendo que el verdadero amor me lo da mi Esposo Celestial, es a ÉL al que debo acudir siempre, ya que ÉL está peleando está dura batalla junto a mi. ÉL es todo lo que necesito y a ÉL es a quien debo darle toda la gloria, el amor y por supuesto el primer lugar en nuestras vidas, todo está en sus manos y todo es bajo su voluntad. Gracias al Señor por ser todo lo que necesito, por cambiar mi vida de esta forma tan increíble y por nunca dejarme sola, su amor es maravilloso y incondicional.

Salmo 23
El Señor es mi pastor,
nada me faltará.
2 En lugares de verdes pastos me hace descansar;
junto a aguas de reposo me conduce.
3 El restaura mi alma;
me guía por senderos de justicia
por amor de su nombre.
4 Aunque pase por el valle de sombra de muerte,
no temeré mal alguno, porque tú estás conmigo;
tu vara y tu cayado me infunden aliento.
5 Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos;
has ungido mi cabeza con aceite;
mi copa está rebosando.
6 Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida,
y en la casa del Señor moraré por largos días.

~María