♕Promesa de hoy: “Y, en efecto, toda corrección, al presente, no parece ser de alegría, sino de tristeza, pero luego produce fruto pacífico de justicia en los que por ella se ejercen.” H1211
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Judie, ¿Cómo comenzó realmente tu viaje de restauración?
Después de un mes y 9 días, mi et volvió. En total, se fue 1 mes y 22 días. Los dos tenemos 23 años y apenas llevamos casados un año y medio. Siempre tuvimos problemas porque ambos somos jóvenes y atractivos y por eso siempre ha habido alguien tratando de hacernos traicionar, hombres y mujeres, a quienes les importa un comino nuestro compromiso matrimonial. Constantemente nos echamos en cara los errores del pasado del otro durante las discusiones solo para herir al otro. No podíamos perdonar.
Un día fuimos a una fiesta en un bar, un lugar al que nunca me gustó ir, cuando me di cuenta de lo farisea que me había convertido. Estaba avergonzada, pensé que era más santa que los demás y pensé que estaban tan orgullosos. En esa fiesta tuvimos muchas discusiones y yo hice que mi et se sintiera avergonzado frente a todos sus amigos porque hacía cosas que no me gustaban. Yo era muy pendenciera. Todo tenía que ser a mi manera. Luché, manipulé, hice que todos se pusieran de mi lado. Fui una completa tonta!! Estaba derribando mi casa con mis propias manos. Ese día fue el colmo en el mar de peleas cuando mi et decidió dejarme. Pero en realidad no se fue y las peleas continuaron hasta que le dije que se fuera como lo había hecho muchas veces antes. Cuando todavía no se fue, hice las maletas y dije que me iría si no lo hacía.
Cuando finalmente se fue, no lo "dejé ir", sino que le envié innumerables mensajes y lo bombardeé en todas las redes sociales. Fue entonces cuando descubrí la om (otra mujer) . Estaba devastado, cada foto que veía era como una bofetada en la cara, una daga en mi corazón. Finalmente me di cuenta que con mi actitud yo era quien había sembrado y regado todo esto que ahora estaba cosechando.
Clamando a Dios, encontré RMI en un comentario después de publicar una oración en una aplicación de oración. Después de encontrar el RMI, pude sentir la presencia de Dios en mi vida. Descubrí cuánto se preocupa por mí y por aquellos a quienes amo. Descubrí que Dios me hizo pasar por esto para poder ayudarme a dejar de cometer errores. Me recordó todo lo que le pedí, las veces que le dije: “¡Padre Dios, no quiero cometer errores como estos, ayúdame!” Cuando leí todos los testimonios de parejas que pasaron 12, 15, 20 años cometiendo errores en su vida marital, supe que podía cambiar.
Empecé el curso después de leer el libro "Cómo Dios puede y va a restaurar su matrimonio" y pronto logré "soltarme". Antes de venir aquí, mis días eran largos y no había tiempo para estar con mi amado EC (Esposo Celestial) . Antes de venir aquí, trabajar con personas era una carga, quería huir. Entonces todo cambió, quise correr y gritarle al mundo que Él es mi todo, diciéndoles que antes lloraba de desesperación y me embargaba de tristeza, y ahora tengo contentamiento, paz y gratitud porque mi EC (Esposo Celestial) suministra todo!
¿Cómo cambió Dios tu situación, Judie, mientras lo buscabas de todo corazón?
Dios continuó mostrándome lo equivocado que estaba. Que sucia era una “tumba blanqueada” y que hipócrita era, no escuchando Sus advertencias y no siguiendo Su Palabra siendo ignorante de Sus principios.
Al comienzo de mi Viaje de Restauración estaba devastado. Mi et venía regularmente a nuestra casa a cuidar al perro y después de limpiar la perrera regresaba a casa de su madre donde se quedó durante ese tiempo. Cuando llegó lloré y me encargué de mostrarle lo triste que estaba. así que, por supuesto, no me habló mucho y pronto se fue.
Llegamos a esta separación porque yo era pendenciera, amargado, rencoroso y llevábamos peleando casi tres meses seguidos. Luego, en una de las peleas se puso violento y nos lastimamos. Simplemente no sabía cómo controlarme. A pesar de ser cristiano y estar en el ministerio, no podía encontrar paz y nuestro hogar reflejaba la agitación.
Varias veces antes de nuestra separación, sentí que Dios me instaba a arrodillarme y orar y ayunar por mi matrimonio, pero nunca lo hice. Mi esposo terrenal ya estaba distante, evitándome y no queriendo tener intimidad conmigo. Busqué todo lo suyo, su celular, su Facebook y hasta borré a varias personas de sus redes sociales.
¿Qué principios, de la Palabra de Dios (o a través de nuestros recursos), Judie, te enseñó el Señor durante esta prueba?
El principio de un espíritu suave y apacible , de buscar a mi esposo celestial todo el tiempo, de tenerlo como primero en todo en mi vida. Rezar la Palabra, salir de las redes sociales (nota: había intentado salir varias veces y nunca lo conseguí) y tantas otras!!!
¿Cuáles fueron los momentos más difíciles en los que Dios te ayudó, Judie?
Cuando descubrí la otra mujer y vi que mi marido terrenal había borrado todas nuestras fotos de las Redes Sociales. Y cuando me quedé totalmente sin luz y sin agua en casa (antes de que me soltara y Dios volviera el corazón de mi et para pagarles). Fue mucha presión para mí y varias veces quise rendirme y volver a la casa de mi madre.
Judie, ¿cuál fue el “punto de inflexión” de tu restauración?
El punto de inflexión de mi restauración fue cuando estaba muy contenta con solo tener a mi Esposo Celestial y ya no me importaba tanto la restauración sino animar a otros en una crisis matrimonial. Fue entonces cuando mi pastor me llamó y me preguntó sobre mi et (había compartido mi situación con muchas personas antes de conocer el principio de guardar silencio).
Mi esposo terrenal comenzó a pagar mi plan de salud (estoy en medio de un tratamiento contra una enfermedad), incluso pagó mi plan de teléfono e hizo compras por mí. Una vez que pude soltarme , mi esposo terrenal se me acercó a menudo. Aunque ya se había llevado a nuestro perro, siempre encontraba una excusa para venir a verme a nuestra casa una vez que tenía a mi Esposo Celestial. Fue difícil no volver a mi antiguo yo, pero lo mantuve primero incluso después de que comenzamos a tener una relación íntima continua con mi esposo terrenal semanalmente.
Cuéntanos ¿CÓMO sucedió, Judie? ¿Su marido acaba de entrar por la puerta principal? Judie, ¿sospechabas o podías decir que estabas cerca de ser restaurada?
Una tarde cuando llegué a casa allí me estaba esperando. Se puso de pie y me abrazó y lloró y me preguntó si todavía lo amaba. Cuando le dije que sí, me dijo que se arrepentía de irse, que quería volver a casa y tantas otras cosas que solo podía ser DIOS. Dios volteó el corazón de mi esposo terrenal a mí una vez que mi corazón se volvió a Él!! es increible, EL es increible! Yo se que Dios me llamo y llamo a mi et para una gran labor en ayudar a otras parejas. Regresó completamente diferente también. ¡Ahora va a la iglesia y lee la Palabra por su cuenta! ¡Gloria a Dios que transforma, cambia, resucita, que encuentra lo perdido, que toma lo perdido y le da un Nuevo Comienzo! ¡Te amo, Señor! ¡No puedo contener las lágrimas de alegría! Solía conocerlo por escuchar acerca de Él, pero hoy sé quién es Él, Él es mío y yo soy de Él.
¿Recomendarías alguno de nuestros recursos en particular que te haya ayudado, Judie?
El libro "Cómo Dios puede y va a restaurar su matrimonio" y "Una Mujer Sabia" y tus cursos , todos ellos.
¿Te interesaría ayudar a animar a otras mujeres, Judie?
Sí
De cualquier manera, Judie, ¿qué tipo de estímulo te gustaría dejar a las mujeres, en conclusión?
¡No te rindas! ¡Dios siempre tiene el control!
Hijo mío, no desprecies la corrección del Señor, y no desmayes cuando eres reprendido por él; porque el Señor corrige lo que ama, y azota a cualquiera que lo recibe como a un hijo.
Si soportáis la corrección, Dios os trata como a niños; ¿Por qué, qué hijo hay que el padre no corrige?
Pero si no tenéis disciplina, de la que todos son partícipes, entonces sois bastardos, no niños.
Además, tuvimos a nuestros padres según la carne, para corregirnos, y los reverenciamos; ¿No estaremos mucho más sujetos al Padre de los espíritus, para vivir? Porque aquellos, en efecto, por un ratito, nos corrigieron como a ellos les pareció; pero esto, para nuestro beneficio, para ser partícipes de su santidad.
Y, en efecto, toda corrección, en el presente, no parece ser de alegría, sino de tristeza, pero luego produce un fruto pacífico de justicia en los que por ella se ejercen. Por tanto, volved a levantar vuestras manos cansadas, y vuestras rodillas dislocadas, y haced caminos rectos para vuestros pies, para que lo que cojea no se desvíe del todo, sino que se sane”. H12513
Creo que todas enfrentamos los primeros momentos de crisis, con orgullo, histeria y persecución; como dice Jewel nuestro Amado nos permite experimentar estas situaciones para un propósito mayor y hoy veo cómo yo puedo decir que yo fui ese tipo de mujer como Judie.
Su historia cambia cuando dice algo muy particular: “cuando estaba muy contenta con solo tener a mi Esposo Celestial y ya no me importaba tanto la restauración sino animar a otros en una crisis matrimonial. ”
Fue cuando ella empezó a sentirse plena y cuando sus expectativas estaban fijadas en su Esposo Celestial que las cosas empezaron a cambiar; nuestro Amado tiene un propósito para la vida de cada una de nosotras y mas allá de un matrimonio restaurado, que vendrá como añadidura, la enseñanza que me deja su testimonio es que el regalo mas preciado que este proceso te deja es un Esposo Celestial para toda la eternidad y una sanidad de corazón que solo Él te puede regalar, te dejo con estas palabras para que las medites: “Solía conocerlo por escuchar acerca de Él, pero hoy sé quién es Él, Él es mío y yo soy de Él.”