“Sólo Dios puede hacer cosas nuevas”

 La Promesa del día: "No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos". Colosenses 6:9 

Todo empezó en el año 2014 donde descubrí la infidelidad de mi esposo, para mí fue devastador ya que él era el esposo ejemplar que cualquier mujer pudiera querer, sirviendo en la iglesia, hogareño, todos los planes eran para su familia. Decidí perdonarlo y él decidió quedarse; en medio de tanta confusión y dolor, buscamos ayuda que por no conocer el camino de la restauración, fueron inútiles los consejos y sólo un pastor nos sugirió que nos separemos por que mi esposo argumentaba que no me amaba, otro matrimonio de pastores nos animaron en seguir adelante y creyendo por la restauración; sin embargo yo no entendía cómo hacerlo; por más que sabía de la palabra me hundí en el dolor, decepción y rabia pensando en porqué había pasado.

Hasta en noviembre del 2018, que mi esposo se hartó y yo también muy valiente le pedí que se fuera de la casa, pero al hacer esto constantemente, él buscó a la otra persona para poder separarse y hacer una nueva vida, fue entonces donde toqué fondo y el Espíritu Santo me empezó a redargüir, sabía que no era la voluntad de Dios que yo me separe y empecé en la búsqueda de Dios para que mi corazón fuera transformado.

Encontré sus videos y en febrero me inscribí en los Cursos y recuerdo que empecé a poner en práctica la palabra, los audios los escucho una y otra vez hasta saber que ir haciendo poco a poco. Mi esposo no se fue, y he visto cómo Dios está hablando a su corazón, esa es mi oración; que todo vuelva a los planes originales de cuando nos casamos, que eran servirle como familia. Dios es fiel! Cada día me sorprende. Mis hijas y yo durante este tiempo de batalla donde mi esposo tenía su corazón duro, seguíamos sirviendo en la iglesia local. También encontré tres amigas que se pusieron a orar fervientemente por la situación y se obtuvo la victoria, empecé a bendecir a la otra persona y de verdad ella me buscó desesperada preguntando si era verdad que mi esposo y yo nos estábamos divorciado, me lo preguntó en un correo (esto fue prueba de fuego, porque uno de sus capítulos menciona que cuando estamos cerca de la victoria se pone más difícil), esta fue la respuesta a las oraciones que había hecho un día antes, que Dios aborrece el divorcio y como su hija "No" andaría en esos caminos, al ver esa pregunta el Espíritu Santo me guió a contestarle que pidiera ayuda al Espíritu Santo, porque Él le haría saber la verdad. Le respondí de esta forma porque ella tiene conocimiento de Dios.

Gloria a Dios! Porque cuando le dije a mi esposo que me habían mandado el correo, pero que yo no quería saber nada de esta situación, pues había decidido rendírsela a Dios y que lo que decidiera Dios me protegería, mi esposo dijo: no haré nada que tenga que ver con otra mujer, Wow! Le dije: Ok te creo y no volveré a tocar el tema. Hasta ahora mi enfoque es agradar a Dios y obedecer su palabra. Sólo Dios puede hacer cosas nuevas.

Gracias por haberme compartido los audios. Sigo adelante creyendo, porque sé que no para aquí.

~ Noemi en México