“¡Esto tiene que ser tú!”

♕ La Promesa del día: “Pero el Señor cuida de los que le temen, de los que esperan en su gran amor” Salmos 33:18

☊ PR Audio Brianda

¡Bendito y alabado seas por siempre mi amado Señor! Gracias por tu amor y tu cuidado, por tu fidelidad y tu respaldo. ¡Eres maravilloso!

Mi testimonio de alabanza está relacionado con mi relación con el Señor, una de las cosas que más me gustó cuando llegué a RMI fue que muestra el camino y te da la convicción de poder conocer profundamente al Señor y hacerlo de una manera diferente no desde lejos sino como alguien cercano a mí y que no sólo me ve desde el cielo y me dió salvación sino que quiere ser mi Esposo Celestial.

Este ha sido uno de los retos más grandes para mí y mi mas grande deseo, conocerlo como mi EC y estar totalmente enamorada de Él, lucho conmigo misma porque muy fácilmente desvío mi mirada a lo que veo y eso ataca mi fe.

Los últimos días me había sentido un poco desanimada por no sentir eso que comentan tantas hermanas en los testimonios de que pueden estar alegres y en paz aunque su mundo se esté desmoronando y se lo he pedido tanto al Señor, que me ayude a tener contentamiento.

Me preguntaba si es que estoy haciendo algo mal, llegué a preguntarme ¿será que Dios si considera que lo estoy buscando de corazón?, ¿lo estaré haciendo bien o no? Su palabra dice que si somos dudosas no esperemos nada de Él, ¿será por debilidad en mi fe que no siento ese regocijo en mi situación? en fin, muchos pensamientos con los que el enemigo me atacaba y me hacía sentir "no merecedora".

Hubo un testimonio de matrimonio restaurado de una de las lecciones en el que la hermana comentaba que en la medida que más se enamoraba del Señor, más gestos de cariño mostraba su ET. Lo leí y pensé, "algo así sería bueno, es una manera de medir que tienes tu mirada en el lugar correcto (en el Señor) cuando el esposo está en casa".

Bueno, de una manera inesperada uno o dos días después mi ET tuvo un gesto de cariño, me pidió que le diera un abrazo y los días siguientes fue cariñoso al llegar del trabajo (lo que era sorpresivo ya que sabemos lo indiferente que puede ser un hombre cuyo corazón está lejos de su esposa), en seguida recordé el testimonio y le di la gloria a Dios, de verdad que fue una alegría muy grande para mí, no el abrazo en sí, sino sentir que esto era el Señor disipando mis dudas. ¡Cuán bello es el Señor!

Para mí fue como si Él me estaba diciendo algo como "Si te veo, sé que me anhelas, que buscas mi rostro. No estoy lejos. Estoy cerca de ti". Y uso un ejemplo que sabía que había captado mi atención. En ese momento sólo pensaba ¡Eres tú Señor, eres tú! ¡Esto tiene que ser tú!.

Es motivo de alegría que aún con tropiezos voy en el camino correcto a encontrarte mi EC. ¡Alabado seas mi precioso Señor! El Señor es maravilloso y me da seguridad de que yo también seré su Novia y El mi Esposo Celestial, que también voy a estar enferma de amor por Él.

¡Te Amo mi Señor, quiero vivir para Ti y que Tu seas todo! Quiero ser tuya para siempre y que ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna cosa creada me haga desviar mi mirada de ti. Haz morir mi carne y que todo mi ser y mi voluntad sean sometidos a Ti, el único y sabio Dios.

~Brianda en Venezuela
Soy una compañera que diezma. Aprenda más.