♕ La Promesa del día: "Alzaré mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová, que hizo los cielos y la tierra". Salmos 121:1-2
De ~ Anastasia en Colombia
Queridas novias, al leer este capitulo me sentí tan animada y fortalecida en mi fe, realmente veo la bendición de ser transparentes en compartir nuestras debilidades con otras mujeres y así dejar ver lo inmenso de Su amor por cada una de nosotras en medio de nuestra debilidad.
Esta escritura me muestra la forma en que el enemigo obra para desanimarme y alejarme del propósito del Señor para mi vida. No la había interiorizado antes, pero al leerla hoy sentí que se prendió una luz en mi interior.
Pude darme cuenta de que nuestro Amado tiene control de todas esas cosas y que pese a la destrucción que eso trajo El y Su amor estuvieron allí para Michel y sus hijos. Él usó eso para un bien mucho mayor, revelarnos a todas nosotras Su amor a través de cada uno de los libros de la serie de Vida Abundante que sin el corazón endurecido de ese Faraón no se hubieran podido lograr.
Muchas veces no comprendemos las cosas por las que pasamos, las pruebas tan difíciles o la "demora" en recibir nuestro milagro, pero Él tiene cuidado de cada detalle y piensa no solo en bendecirnos a nosotras sino en usar nuestros testimonios para bendecir a los que Él pone en nuestro camino. Necesitamos estar tan enamoradas de Él para permitirle hacer "lo que sea necesario" con nuestras vidas para atraer a otr@s hacia Él.
Me he estado sintiendo acorralada por las pruebas en mi salud, así que este capitulo [Capítulo 7: Arrinconada] me confirmó lo que Él me estaba mostrando desde hace unos días, y es que Él no necesita mi ayuda, pero más que eso, me doy cuenta de lo difícil que es "no hacer nada" porque al igual que la escritora tengo esa pregunta constante en mi cabeza "¿qué puedo hacer?". Esa misma pregunta surgió cuando mi piel estaba cubriéndose de lesiones a causa del acné hormonal -cuando estaba acorralada- y cuando busqué a mi Amado me mostró áreas en mi corazón que Él deseaba tratar, comenzando por el orgullo... así que comencé a rendirme a Él, pero constantemente volvía a mí ese cuestionamiento "¿qué hago?" especialmente cuando la situación tiende a empeorar.
Lo triste es que a veces incluso tome algunos de sus consejos, [omitiendo que ninguno de ellos ha atravesado por este camino, ninguno de ellos ha sido sanado de un acné hormonal, ¿así que como pueden ellos saber la respuesta?], en mi desesperación (que es el sentimiento que nos acompaña cuando estamos acorraladas, además de la preocupación) comencé a hacer obras de la carne, tomando pastillas y comprando productos para mejorar, lo cual en realidad empeoró la situación. Un día tuve esta nueva pregunta en mi corazón ¿si me sano tomando medicamentos, podré decir en mi corazón que Él me sanó o en realidad pensaré que me sanó la medicina tradicional; a quien le da la gloria lo que estoy haciendo? En ese momento entendí que ese no era Su plan, lo que le costaba a mi carne era esperar, así que ese debía ser el camino a seguir.
Rendiré cada área de mi vida a mi Señor, pongo mis ojos y mi confianza en Él que es mi único salvador y ayudador, nada ni nadie en el mundo pueden cambiar mi situación, solo Él. Cuando esté acorralada entonces miraré nuevamente al cielo para recordar de dónde proviene mi ayuda y por su puesto leeré los testimonios que tanto me animan a buscarlo y a depender de Él. Es una gran bendición que tengamos testimonios a diario en el Animador! y todos los demás que han construido mi fe a lo largo de este viaje.
Querida novia, estar acorraladas y tener un faraón persiguiéndonos es un buen lugar en donde estar!! Es el lugar en donde podremos ver Su gloria, amor y salvación, te animo a leer este capitulo tan lleno de Su verdad y amor.
La mentalidad de pobreza puede estar en cada área de nuestra vida, qué bueno es tener leer este libro para abrir nuestros ojos a la verdad y ser libres de experimentar la vida abundante que el quiere que disfrutemos.
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